Cuando las naciones emergentes más poderosas del mundo, las del llamado BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica), se reunieron en Nueva Delhi hace un año, ya estaba surgiendo una nueva realidad: en medio de una crisis económica global, la noticia del espectacular crecimiento económico de estas naciones comenzaba a perder su brillo.
Ahora, los mandatarios de los BRICS se reúnen en Durban, Sudáfrica, para su quinta cumbre anual y, sin duda, enfrentan una serie de nuevos desafíos.
Las tasas de crecimiento del bloque se han reducido, y lograr una recuperación este año parece una posibilidad lejana.
Muchos se preguntan si estos países, que en 2008 eran vistos con gran entusiasmo por los inversionistas, podrán este año mantener su poderío.
El Fondo Monetario Internacional (FMI) pronostica un crecimiento del producto bruto del 5,5% en los mercados emergentes en 2013, un cálculo muy similar al 5,1% de 2012.
Los BRICS ya no sólo están enfocados en sus tasas de expansión o en ser destino de inversionistas, le explica a la BBC HSS Viswanathan, de la Observer Research Foundation (ORF), una consultora con sede en India.
Ahora tienen otros asuntos en su agenda y están mirando al mundo desde una perspectiva diferente.
De manera que lo que los BRICS están diciendo es: queremos poner en la agenda una narrativa alternativa para los asuntos globales importantes, como desarrollo, crecimiento, desarrollo sostenible y varios otros.
DESACELERACIÓN La desaceleración económica de los BRICS se debe principalmente al estancamiento en el que se encuentra el mundo desarrollo, principalmente por los problemas de la Zona Euro.
Algunos apuntan que son precisamente estas dificultades de la Zona Euro y la crisis en Chipre los que apoyan el argumento de que los BRICS son ahora más influyentes que nunca en el escenario económico global.
Pero otros son menos entusiastas.
Según Stefan Wagstyl, del diario británico Financial Times, los inversionistas están mirando a regiones donde las tasas de crecimiento del PBI [Producto Bruto Interno] son mayores que antes de 2008: el sureste de Asia, por ejemplo, y partes de África, especialmente Nigeria.
Por el momento, estas economías son demasiado pequeñas para hacer mella en el dominio colectivo de los BRICS. Pero está claro que los mercados emergentes se están volviendo más diversos.
DIVISIONES Además, también persisten algunas divisiones dentro de los BRICS. Ruchir Sharma, jefe de mercados emergentes del banco de inversiones Morgan Stanley, destaca que el grupo tiene diferencias internas en el asunto de los precios de las materias primas.
China e India, que importan vastas cantidades de commodities, quieren precios más bajos. Mientras que los exportadores Brasil, Rusia y Sudáfrica desean valores más altos.
Además, hay varias otras fuentes de tensión entre los BRICS sobre asuntos comerciales. Por ejemplo, las importaciones baratas de China a Sudáfrica, que según algunos han causado el deterioro del sector manufacturero de este último país.
Brasil, por su parte, llevó un caso a la Organización Mundial del Comercio (OMC) después de que Sudáfrica lo acusara de inundar su mercado con pollos a un valor por debajo del costo.
Y las regulaciones y obstáculos burocráticos en India también han provocado roces entre los miembros de los BRICS.
Ciertamente, facilitar la forma de hacer negocios es algo que ayudará en el crecimiento comercial entre los países de los BRICS, le dijo a la BBC Sunil Joshi, presidente ejecutivo de Neotel, la compañía de telecomunicaciones sudafricana.
Esperamos lograr algún progreso en la cumbre, añade.
Los BRICS continúan dominando los mercados emergentes y son responsables de un 20% del producto mundial.
Pero tal como afirman los expertos, el verdadero desafío de estos cinco países en 2012 será ayudarse mutuamente para reactivar sus economías y colaborar más estrechamente en áreas como innovación industrial y energía sostenible.