Si hay un grupo humano que sabe que en estos momentos hay poco que festejar ese es el personal de salud. Con números de contagios y fallecidos por coronavirus que no dejan de aumentar y rebrotes en varias partes del mundo, pensar en celebrar las Fiestas Patrias en el Perú, el segundo país latinoamericano con más contagios, casi parece fuera de lugar.
Sin embargo, personal médico peruano que combate al Covid-19 en diferentes ciudades del planeta afirma que esta fecha debe aprovecharse para repensar el verdadero significado del patriotismo y el civismo nacional.
- OMS dice que el coronavirus es de lejos la peor emergencia de salud mundial
- Texas: abuelo murió de coronavirus luego de que su nieta se contagiara en una fiesta
- Los emprendedores colombianos que diseñaron una burbuja de protección contra el coronavirus | FOTOS
Aunque se encuentran a miles de kilómetros de distancia, algunos en países bastante afectados por el virus como Estados Unidos y España, estos profesionales de la salud siguen muy de cerca las noticias sobre el avance del virus en el Perú. Muchos han emprendido campañas de solidaridad y capacitación en beneficio de sus colegas peruanos. Otros comparten a diario con sus amigos y familiares en nuestro país sus experiencias sobre cómo se enfrenta al Covid-19 en los países en los que están y los alertan a seguir las reglas.
El Comercio conversó con algunos de ellos y recogió sus recomendaciones, así como sus opiniones sobre cómo se debería entender el patriotismo en tiempos de pandemia.
Luis Raez (Florida, EE.UU.)
Director médico del Memorial Cancer Institute en el Memorial Health Care System en Miami
“La pandemia nos ha enseñado lo vulnerables que somos, que hay cosas que van más allá de lo que podemos prevenir, que hay que estar preparados para cualquier contingencia y que la única forma de salir de esto es trabajando juntos. Yo soy médico especialista en cáncer de pulmón y ha sido muy difícil continuar el tratamiento de cáncer y enfrentar el Covid-19 al mismo tiempo. Y aún seguimos en el momento más difícil.
En el sur de Florida estamos en el pico del virus. Nuestras enfermeras y médicos están terriblemente agotados y no sabemos cuánto tiempo va a durar. Ahora que el distanciamiento social y las reglas de la cuarentena se han relajado, estamos sufriendo un segundo pico que es muchísimo peor al que vimos en abril.
Cosas tan simples y sencillas como usar mascarilla, respetar el distanciamiento social y seguir las reglas de la cuarentena constituyen una forma de prevenir o retardar el contagio del virus de manera tal que no todos nos enfermemos al mismo tiempo y no rebasemos la capacidad hospitalaria. Es muy importante la colaboración de todos”.
Liz Páucar Loli (Lillehammer, Noruega)
Médico especialista en reumatología. Jefa del cuerpo médico de Revmatismesykehuset AS. en Lillehammer
“Esta pandemia nos ha enseñado mucho, pero en particular cuán vulnerable es nuestra sociedad y que no es la crisis en sí la que determina si se vive un desastre o no, sino cuán vulnerable es una sociedad ante esa crisis. Esa vulnerabilidad depende de la economía, de la cultura, de la estructura de las instituciones y de sus líderes. Aunque Perú entró en un estado de emergencia de forma bastante temprana, sus factores de vulnerabilidad han llevado a la catástrofe que se está viviendo. Algo distinto pasó en Noruega. Pese a que el miedo fue igual, el virus se ha logrado controlar.
El consejo que puedo dar a mis compatriotas peruanos es algo muy simple. Ustedes saben que quienes están en primera línea tienen una carga de trabajo enorme. El personal de salud, los policías, las personas que hacen la limpieza vivan grandes niveles de continuo estrés, con miedo de contagiarse y contagiar a sus seres queridos. Por eso, nosotros debemos darles apoyo psicológico, moral y respetar su trabajo, ese trabajo que hacen día a día y que directa o indirectamente salva vidas”.
Luis Chug (Texas, EE.UU.)
Especialista de Neumólogia, Cuidados Intensivos y Medicina del Sueño en el Memorial Hermann Hospital en Houston
“Esta pandemia me ha enseñado que siempre hay que estar preparado para lo inesperado. En lo colectivo, el virus está exponiendo las falencias en nuestros sistemas de salud pública a nivel mundial, además de la falta de apoyo en general al trabajador de salud en todas sus líneas. La parte más difícil para mí fue tener que separarme de mi familia por varias semanas –tenía en casa a un recién nacido y a mi hija de 4 años– y la incertidumbre de no saber cómo podría afectarlos por ser yo un trabajador de salud.
Esta pandemia nos deja muchas lecciones para actuar de cara al futuro. A nivel administrativo, debemos invertir en estrategias innovadoras para la educación y atención de pacientes usando tecnologías como la telemedicina y mejorando la llegada de Internet a todos los rincones del país. También se tiene que invertir en un programa de salud pública para estar preparados para las siguientes olas de casos. Las autoridades y personal administrativo de salud tienen que trabajar y estar en comunicación constante con los expertos de salud y medicina para apoyarlos y cuidarlos. A nivel comunitario, tenemos que seguir las recomendaciones básicas: usar mascarilla y respetar el distanciamiento social”.
Raúl Vasquez-Garagatti (Tennessee, EE.UU.)
Medico Infectólogo e Internista del Hospital Universitario de la Universidad de Tennessee
“Una de las principales enseñanzas que me ha dejado la pandemia es que la anticipación a los problemas es vital y que el optimismo está sobrevalorado en la mayoría de veces y puede nublar los verdaderos problemas. Tenemos que pensar que nosotros somos parte de una sociedad que se necesita entre sí. Si cada persona hiciera un pequeño cambio que tenga un impacto positivo en la sociedad, no la pasaríamos tan mal.
Para mí lo más duro ha sido ver muchos pacientes que están aislados en sus cuartos, sufriendo, llorando porque sienten que la muerte está cerca. Cada persona es un libro con alegrías y tragedias. La vida puede ser muy cruel muchas veces, pero siendo conscientes de esto podemos hacerla más grata, podemos enfrentarla en unidad. Pensemos que la vida es frágil, que debemos cuidar al prójimo como a nosotros mismos. Disfruten de sus familias, háganse más amigos de sus amigos, conozcan más a las personas que están cerca, reorganicen sus prioridades en la vida”.
Margarita Chávez (Piamonte, Italia)
Enfermera profesional con maestrías en Asistencia de enfermería en Sala Operatoria y en Bioética Clínica. Trabaja en uno de los Hospitales públicos en Turín
“Esta pandemia nos ha enseñado sobre la fragilidad de la persona humana. Nos ha hecho ver el valor de la solidaridad y el orgullo de la profesión sanitaria, así como la importancia de las relaciones interpersonales, que la vida es sagrada y que tenemos que vivirla plenamente. El momento más duro fue cuando nos comunicaron que como enfermeras profesionales íbamos a trabajar en prima línea contra el Covid-19.
Fue muy difícil en Italia. Era como ir a la guerra sin adiestramiento y eso nos hacía sentir más vulnerables y frágiles, pero la unión entre colegas hizo posible afrontarlo todo. Lo más difícil fue ver a los pacientes luchar contra la enfermedad y al final morir lejos de sus seres queridos y sin dignidad alguna. Mi mensaje para mis connacionales es que no bajen la guardia”.
Gary Gutierrez Campos (Texas, EE.UU.)
Médico Internista-Hospitalista del Memorial Hermann Hospital en Houston
“La pandemia me ha hecho valorar más a mi familia, a mis amigos y a las cosas simples como salir a comer o pasear. También me ha enseñado que es muy importante el trabajo en equipo y la solidaridad si es que queremos ganar esta batalla contra el virus.
Durante esta pandemia hubo muchos momentos difíciles. Recuerdo a una pareja de esposos que fueron hospitalizados casi al mismo tiempo. Llegaron muy enfermos, los dos estaban separados solo por un par de cuartos y no podían verse. El esposo sobrevivió pero la esposa no. Fue muy triste. Para seguir enfrentando esta pandemia es importante no bajar la guardia, tener paciencia y ser responsables con uno mismo y con el resto”.
Manuel Vilchez (Texas, EE.UU.)
Médico especialista en Cuidados Intensivos y Enfermedades Infecciosas en el Houston Methodist Hospital en el Texas Medical Center en Houston
“La principal lección que me ha dejado la pandemia es que a pesar de los muchos avances en ciencia y tecnología que hemos tenido en los últimos años, somos muy vulnerables a las enfermedades infecciosas, especialmente a las infecciones virales para las que no existe tratamiento probado. Lo más difícil de esta pandemia ha sido comunicarse con los familiares de los pacientes a través del teléfono. Usualmente, cuando el paciente está sedado o intubado, los médicos nos reuníamos con las familias en persona al menos una vez al día para hacerles saber qué está pasando. Ahora las visitas están prohibidas y tener que darles las noticias (sobre todo las malas) a los familiares es muy difícil.
Yo recomiendo a los compatriotas y a todos usar siempre las mascarillas y usarlas bien (cubriendo la cara y la nariz), lavar nuestras manos a cada momento, evitar las reuniones con mucha gente y cuidar a las personas mayores y con enfermedades crónicas que son las más sensibles a esta enfermedad”.
Ernesto Cisneros López (Sao Paulo, Brasil)
Cirujano Cardiovascular adulto y pediátrico en el Hospital Israelita Albert Einstein de Sao Paulo
“La principal lección que la pandemia está dejando es que todos somos iguales ante cualquier tipo de circunstancia y que pensar en el prójimo es tan importante como pensar en uno mismo. Recuerdo mucho al primer paciente que colocamos en un tipo de asistencia mecánica, tanto cardíaca como pulmonar llamada ECMO (Extracorporeal Membrane Oxigenation). Era un ingeniero de 42 años, con 90% del área pulmonar comprometida por el Covid-19. Tenía poquísimas oportunidades de sobrevivir, sus dos hijas pequeñas no podían verlo en sus últimos días. Pero después de colocarlo en asistencia, su evolución clínica fue sorprendente, en menos de tres semanas volvió a casa al lado de sus hijas. Esta experiencia fue de extrema satisfacción personal ante la calamidad mundial que estamos atravesando.
A mis queridos compatriotas, solo les pido que tomen conciencia de lo que está sucediendo, que respeten las recomendaciones de las autoridades. En estos momentos difíciles, cada uno debe hacer lo mejor posible para preservarse y para preservar a su familia, sin olvidar que para que nuestro Perú mejore, además de cuidarnos a nosotros, tenemos que velar por el bienestar de nuestro prójimo”.
Jorge Ramos (Madrid, España)
Médico de Familia para el SERMAS (Servicio Madrileño de Salud) y guardias como Médico de Urgencias para el SUMMA 112 (Servicio de Urgencias Médicas de la Comunidad de Madrid)
“La mayor lección que me ha dejado la pandemia es que un virus nuevo puede poner en riesgo la economía mundial y traer abajo cualquier sistema sanitario, sobre todo a aquellos en los que menos se invierte. Muchos momentos me han marcado. Ver cómo mis compañeros caían enfermos. Mi jefe terminó intubado y en cuidados intensivos por el virus. Tengo compañeros aquí y en Lima que han perdido la vida, incluyendo gente de mi edad. Me ha frustrado ver cómo todas las políticas se tomaron improvisadamente y cómo se sigue explotando las fuerzas del personal sanitario.
Mi consejo para los peruanos es que intenten confinarse todo el tiempo que puedan, acoger la idea de que no queda otra alternativa que usar mascarilla y/o protector facial y guantes o gel hidroalcohólico. El cambio frecuente de ropa, limpieza de los enseres, mantener la distancia social tendrán que conformar ‘la nueva normalidad’.
Estimo que este virus estará con nosotros al menos 2 años. Los rebrotes en España están ocurriendo en adultos y adultos jóvenes que salen a discotecas y bares, donde la distancia social es impensable. Actualmente, que los adolescentes salgan de casa y se junten con otros para beber el fin de semana, aquí o allá, es un verdadero acto de insolidaridad”.
Giovanna Starks (Texas, EE.UU.)
Medico Familiar en Baylor College of Medicine (Colegio Medici Baylor) en Houston
“La pandemia me ha enseñado que una enfermedad así no solo afecta al paciente, sino a la familia y a la comunidad. Que se necesita mucha colaboración de todos y que los médicos no pueden combatir la pandemia sin ese apoyo comunitario. Hemos tenido que aprender a atender virtualmente a los pacientes, de lejos, y es bien desconsolador verlos afectados por el virus sin poderles ofrecer un tratamiento efectivo.
Recuerdo a una paciente enfermera que es madre soltera y terminó hospitalizada. Sus dos niños tienen que permanecer con los vecinos. Es muy triste cómo esta pandemia afecta a toda la familia, no discrimina a nadie. Mi recomendación para los peruanos es que actúen como si todos los que están fuera del hogar estuvieran infectados. Hay que protegerse con distanciamiento, mascarillas, lavado frecuente de manos y tener mucha consideración por los demás”.
Franco Parodi (Michigan, EE.UU.)
Médico especialista en neumología en el Ascension Macomb-Oakland Hospital en Warren
“La principal enseñanza que me deja la pandemia es que los seres humanos son más egoístas de lo que creíamos. En estos meses ha sido muy duro saber que la gente se está muriendo y que no hay nada que puedas hacer. Al mismo tiempo saber que a pesar de que la gente se muere, al resto de la población le importa poco y muchos deciden continuar con su vida como si nada pasara.
Lo que debemos hacer hoy es respetar al prójimo y ser consciente de que si no te cuidas puedes enfermar a otras personas que pueden morir por un simple descuido”.
____________________
VIDEO RECOMENDADO
TE PUEDE INTERESAR
- ¿Kanye West puede ser elegido, en serio, presidente de Estados Unidos?
- Estados Unidos: sujeto fue expulsado de una tienda en Wisconsin por usar su polo como mascarilla
- El manifiesto lleno de odio por las mujeres que dejó el asesino del hijo de la jueza federal Esther Salas en EE.UU.
- Se estrelló un helicóptero militar Black Hawk en Colombia: hay nueve militares muertos y seis heridos
- La lucha de la guardia costera italiana para liberar a una ballena de una red de pesca | FOTOS
- Coronavirus: Ejército de Chile cocina y reparte raciones solidarias en Santiago | FOTOS