El equipo negociador de las FARC aceptó hoy la propuesta de jugar un partido de fútbol por la paz que el exfutbolista colombiano Carlos el Pibe Valderrama lanzó a la guerrilla esta semana como contribución al proceso que se adelanta en La Habana.
Aceptamos gustosos el reto que nos hacen y complementamos la propuesta de la siguiente manera: juguémonos el Picado por la Paz en dos cotejos de ida y vuelta, la primera aquí en La Habana, la segunda en el tradicional barrio de Pescadito, en Santa Marta, de donde salieron tantas glorias del fútbol nacional, manifestó la delegación de paz de las FARC en una carta publicada en su blog.
La misiva, dirigida a Valderrama y al también futbolista Chico Serna, responde a declaraciones que los deportistas realizaron esta semana al periódico colombiano El Tiempo, a propósito de su participación en un programa de atención y reparación a las víctimas del conflicto armado en el país sudamericano.
Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) celebraron hoy el compromiso de los futbolistas con las víctimas y el proceso de paz en Colombia, y resaltaron que recibieron sus declaraciones con el mayor de los gustos.
HINCHAS DEL FÚTBOL Los rebeldes aprovecharon para comentar la extendida fanaticada que el fútbol tiene en las filas de la guerrilla, y hasta confesaron que lo practican usualmente en los ratos libres que les deja el trabajo en la mesa de conversaciones por la paz con el Gobierno colombiano, con sede permanente en La Habana.
En concreto, las FARC pidieron a Valderrama y Serna incluir una selección de jugadoras para esos partidos, para que puedan participar también las mujeres que integran la delegación de paz de la guerrilla.
Estamos dispuestos a todo lo pertinente para materializar cuanto antes estos dos partidos. Quedamos a la espera de su respuesta. Mientras tanto, nos alistamos física y tácticamente para salir a la cancha a jugarnos el Picado por la Paz, manifestó el grupo insurgente.
SIGUE LA NEGOCIACIÓN Los negociadores de las FARC y el Gobierno de Colombia iniciaron esta semana en Cuba una nueva fase de los diálogos de paz con la apertura del debate sobre el tema de las drogas y el narcotráfico.
Se trata del tercer punto que negocian las partes tras el comienzo, hace más de un año, de los diálogos que ya han logrado acuerdos parciales sobre la cuestión agraria y la participación política de los guerrilleros.