Según informa hoy “The Guardian” en base a informaciones de Edward Snowden, los servicios de inteligencia británicos interceptaron las comunicaciones de los delegados extranjeros en dos cumbres del G20 celebradas en Londres en 2009. A continuación, algunas claves sobre aquellas operaciones:
¿Con qué información se hicieron los agentes británicos? El servicio británico encargado de realizar escuchas, el Government Communications Headquarters, recabó datos a gran escala, según las informaciones. Se hicieron con las contraseñas de los miembros de las delegaciones participantes y al parecer descifraron los mecanismos de seguridad de las BlackBerrys. Durante el encuentro de ministros de Finanzas de septiembre de 2009 se llegó incluso a establecer un sistema que mostraba en tiempo real quién llamaba por teléfono a quién, afirma el diario británico.
¿Cómo actuaron los servicios secretos? Entre otros métodos, se instalaron cibercafés con computadoras que tenían instalados keyloggers (programas ocultos que registran las pulsaciones que se realizan en el teclado). Así se consiguieron recopilar datos que también se podían utilizar tras las cumbres del G20. Además, The Guardian habla de la posibilidad de leer correos electrónicos antes o mientras (el destinatario) lo esté haciendo, aunque no aporta detalles sobre cómo hacerlo.
¿Cómo consiguieron acceder a los datos de las BlackBerrys? Se trata de una pregunta muy interesante para la que The Guardian no tiene respuesta. BlackBerry asegura que su comunicación es segura y está codificada, y que se transmite a través de un servidor propio de la empresa. Además, en una ocasión amenazó con enfrentarse con las autoridades de India y Arabia Saudí, que pretendían tener acceso a los datos. The Guardian cita un documento de los servicios secretos en el que se habla de posibilidades combinadas contra Blackberry, con las que se consiguió acceder a copias de briefings del G20. Así que tuvieron que tener acceso a contenidos de ese tipo de smartphones.
¿Cómo funcionó la escucha de teléfonos en el encuentro de ministros de Finanzas? Al parecer, en una pantalla de 15 metros cuadrados instalada en el cuartel general del GCHQ se mostraban en vivo las comunicaciones telefónicas establecidas entre los miembros de las delegaciones. Esa información la podían ver 45 analistas que vigilaban a los participantes en el encuentro. Fue la primera vez que se empleó ese sistema y no consta si fue utilizado con posterioridad.
¿Es normal ese tipo de vigilancia? Estas posibilidades técnicas no son ninguna novedad. Pero el hecho de que también fueran vigiladas delegaciones de aliados de Reino Unido, como Turquía o Sudáfrica, podría provocar tensiones diplomáticas.
¿En esas cumbres del G20 actuaron sólo los servicios secretos británicos? Según la información a la que tuvo acceso The Guardian, la Agencia de Seguridad Nacional de Estados Unidos (NSA) intentó interceptar también llamadas vía satélite realizadas a Moscú por el entonces presidente ruso Dmitri Medvedev. El diario no especifica, sin embargo, si esos esfuerzos dieron su fruto.