Niños con AR15, el rifle que usó el pistolero de la masacre de la escuela primaria Shandy Hook, de Newtown, revólveres y otras armas, con gesto serio y mirando fijamente a la cámara. Así es como el fotógrafo estadounidense Greg Cohen pretende mover conciencias un año después de la matanza que dejó 26 muertos, entre ellos 20 niños de 6 y 7 años.
La tragedia de Newtown rompió el corazón de muchos, pero parece que después de un tiempo se olvida y yo quería sensibilizar a la gente con esas imágenes, le dice Cohen a BBC Mundo.
Su exposición Farewell to Arms (Adios a las armas) consta de una serie de instantáneas de niños cargando réplicas de armas que se exponen desde el jueves en la galería The Perfect Exposure de Los Ángeles y con la que su creador pretende recaudar fondos para luchar por un mayor control de las armas.
El fotógrafo de 43 años creció en el área de Newtown y poco después de la matanza de Shandy Hook regresó a la ciudad: Al manejar por la ciudad, simplemente era imposible no llorar. Desde la rampa de la autopista había peluches, flores y recuerdos Era totalmente devastador, recuerda.
Con esa idea en la cabeza, tomó su cámara y se propuso retratar a niños de edades similares a los fallecidos en la escuela de Newtown con armas de plástico.
No es fácil decirle al padre de un niño de cuatro años que quieres tomarle una foto con un arma más grande que él. Hablé con padres que creían en esta causa y se querían implicar de alguna manera. Aunque las armas eran de plástico, a los niños no se les permitía empuñarlas. No se les daba el arma hasta que estaban en la pose idónea y preparados para la foto, afirma.
Y la imagen suele resultar incómoda para el público, dice Cohen.
La verdad es que vemos niños con armas todo el tiempo. Si abrimos una revista, podemos ver a niños de África o de Medio Oriente con armas y lo vemos tan a menudo que no pensamos mucho en ello. Y hay niños de diez años que matan a gente. Pero creo que lo que llama la atención es que (quien se ve en la foto) es el vecino de al lado y no alguien al otro lado del mundo, explica.
Según el fotógrafo, parte del público capta su mensaje inmediatamente y comprenden cuál es su intención.
La mayoría de la gente se siente incómoda, lo que es bueno porque significa que eres una persona sensible. Otras personas se sienten muy incómodas, más ofendidas y lo reciben de manera más negativa. Y mi sensación es que si te sientes muy incómodo y molesto, recomendaría canalizar esa sensación y hacer cosas positiva. Y una tercera parte, la menor, que no se sienten identificados, concluye.
Pese a que él se metió en la cruzada para tratar de poner su parte en el intento de acabar con las muertes de niños con armas en EE.UU, Cohen sabe que el proceso será largo y considera que pasará por la educación y por implementar legislaciones más estrictas y mayores controles para comprar armas.
Va a tomar tiempo. Se ha cambiado la visión del tabaco, de los cinturones de seguridad Así que con un poco de suerte también cambia la visión sobre esto, concluye.