Los billetes de dos dólares son vistos como una rareza que puede valer mucho dinero en subastas y también como un problema para los trabajadores de los bancos. Son pocos y eso los convierte en ejemplares raros que, con características inusuales, pueden ser codiciados por los coleccionistas. Lo que pocos sabían es que hay gente en Estados Unidos que lo llevan en su billetera o bolsillo y que no lo gastan así tengan que regresar a pie a su casa. ¿Por qué lo hacen?
Incluso hay billetes de dos dólares que pueden valer hasta US$4,500 si cumplen con ciertas particularidades. Al existir pocos ejemplares, es uno de los favoritos del mercado numismático.
Otra pieza que llama la atención de los coleccionistas son los billetes de dólares de sello rojo, marrón y azul. Este tipo de ejemplares pueden valer entre US$1,000 y US$4,500 entre los compradores más generosos.
Si buscas más dinero que los anteriores, puedes buscar el billete de dos dólares que puede alcanzar a tener un valor de US$5 mil gracias al número de serie que lleva impreso. Pero esta no es la razón por la que los estadounidenses guardan su ejemplar, sino que hay otro motivo.
¿POR QUÉ LOS CIUDADANOS EN ESTADOS UNIDOS LLEVAN UN BILLETE DE DOS DÓLARES QUE NO GASTAN?
Los ciudadanos de Estados Unidos suelen llevar un billete de dos dólares en la billetera o en sus bolsillos por la creencia de que ese ejemplar, poco frecuente en el intercambio diario de dinero, es de buena suerte y puede atraer más ingresos económicos a quien lo lleve consigo.
Los billetes de dos dólares son pocos, aproximadamente el 1% de lo que se imprime en Estados Unidos, por ello las personas creen que pueden darles fortuna si lo tienen en sus salidas y no lo usan para nada.
La elección del valor de $2 también está asociado con la dualidad, el equilibrio y la armonía. Para muchos, este billete representa la unión de opuestos y puede atraer equilibrio y buena fortuna en la vida.
¿CUÁNDO FUE EMITIDO EL BILLETE DE DOS DÓLARES?
El billete de dos dólares fue emitido por primera vez en 1862. En ese año, apareció con el rostro del padre fundador Alexander Hamilton, el primer secretario del Tesoro. Sin embargo, en 1869, esta imagen fue reemplazada (hasta hoy) por la de Thomas Jefferson, el tercer presidente de Estados Unidos.