Que Estados Unidos sea un país con una amplia diversidad cultural no debería sorprender a nadie, pues se trata de la región con mayor cantidad de migrantes de diversas regiones del planeta, desde refugiados camboyanos, a los que pertenece un afortunado ganador de Powerball hasta ciudadanos llegados de su mismo continente, como las regiones sudamericanas. Sin embargo, una de las comunidades más curiosas es la Dearborn, en Detroit, Michigan, que se ha convertido en la primera ciudad de mayoría árabe en el país.
Y sí, atrás quedaron los miedos y la ignorancia que rodeaba a este grupo de personas tras los conflictos de inicios de siglo, pues gracias a su resiliencia y trabajo comunitario, la zona, que tiene fuertes lazos con la Ford Motor Company, se ha convertido en el lugar más árabe de Estados Unidos.
Combinando tradición, una sólida religión, costumbres que perduran hasta nuestros días y una gastronomía que te transporta a su lugar de origen histórico, Dearborn es más que solo una ciudad, es un pedazo de Medio Oriente clavado en el país.
DEARBORN, LA CIUDAD MÁS ÁRABE DE ESTADOS UNIDOS
De acuerdo con un informe de Dorothy Hernández para la BBC, desde 2023, Dearborn se convirtió en la primera ciudad de mayoría árabe del país y esto se nota desde su ingreso, pues letreros en árabe e inglés se alinean en Warren Avenue y Michigan Avenue, las dos calles más importantes de la localidad.
Con 110 mil habitantes, la ciudad es la sede del Museo Nacional Árabe Estadounidense y de la mezquita musulmaa más grande de América, con leyes tan consideradas con la tradición de Medio Oriente que hasta el Eid, fin del ayuno del Ramadán, es un feriado pagado para los empleados de la ciudad.
Además, el adhan islámico o llamado a la oración, que ocurre en varios momentos del día, se pueden compartir desde los altavoces de una mezquita sin ningún tipo de inconveniente. “La patria lejos de la patria”, le comentó un ciudadano a la corresponsal.
HENRY FORD, ¿EL RESPONSABLE DE LA CIUDAD?
De acuerdo con Jack Tate, curador del Museo Histórico de Dearborn, la historia de la ciudad empezó a escribirse en el siglo XX, cuando el fabricante de autos más exitoso del momento, Henry Ford, trasladó la sede de Ford Motor Company de Highland Park, a 10 millas de distancia, a Dearborn.
Conocido por su antisemitismo y segregación racial hacia los afroamericanos, el magnate apuntó a los inmigrantes del Medio Oriente para contratarlos en la producción de sus famosos Modelo T de 1908, un vehículo histórico.
“En ese momento era una pequeña comunidad bastante tranquila. Y una vez que se abrió la planta, venía gente de todo EE.UU. y de todo el mundo con la intención de trabajar para el señor Ford. Ese fue el gran comienzo para la población de Medio Oriente aquí”, explicó el curador.
Como dato pintorezco, existe la leyenda de que Ford le comentó a un marinero yemení que pagaba hasta 5 dólares al día a sus trabajadores, un sueldo muy por encima en la época, atrayendo a más inmigrantes a la zona de Detroit.
Fue así como la tranquila aldea de 2400 habitantes se convirtió en una zona con gran concentración de árabes en Estados Unidos, la cual se fue afianzando con el paso de los años.
UNA CIUDAD QUE FLORECE
Para Matthew Jaber Stiffler, director del Centro de Narrativas Árabes, mientas los inmigrantes echaban raíces para ser árabes estadounidenses, iban creando una fuerte red comunitaria que animó a otros compañeros a seguirles.
“Comenzaron a abrir consultorios médicos, restaurantes y tiendas de comestibles, con lo que se crea un enclave. Y luego, desafortunadamente, en sus países de origen, especialmente el Líbano, Yemen, Palestina e Irak, hubo continuos conflictos, que seguían obligando a la gente a migrar. Entonces, Dearborn seguía recibiendo gente nueva”, apuntó..
Entre las miles de historias se encuentra la de la familia de Amanda Saab, la chef libanesa que nación y creció en Dearborn luego de que sus padres migraron a la ciudad en la década del 70, encontrando un nuevo empleo e iniciando una nueva historia en la ciudad.
Como se recuerda, en 2015, Saab fue la primera mujer musulmana con hijab en competir en el reality MasterChef USA, y tras el estallido del conflicto entre Israel y Gaza creó Chefs for Palestine, una organización en la que varios expertos de la cocina promueven campañas de donación al Fondo de Ayuda para Niños Palestinos y la Asociación Médica Palestino Estadounidense.
“Dearborn es una de las comunidades más hospitalarias, amables y generosas. Siempre ha sido una especie de faro, el centro, la fortaleza... Todas las cosas que realmente nos conectan con la comunidad y la fe para mí están en Dearborn”, indicó.
LA GASTRONOMÍA, EL PRINCIPAL ALIADO DE DEARBORN
El informe destaca que la ciudad tiene uno de sus principales atractivos en la escena gastronómica, pues mantiene la esencia única que ha hecho que miles de personas acudan en masa a tiendas de comida, cafés y restaurantes de Medio Oriente.
“Dearborn es una aventura gastronómica en sí misma”, dijo Saab.
Por supuesto, la experiencia gastronómica se combina con visitas a diversos atractivos turísticos de la localidad, como la enorme mezquita en Ford Road, a sólo dos millas de la sede de la Ford Motor Company, la cual cuenta con espacio para 1.000 personas en oración.
Cúpulas doradas de la mezquita, los altísimos minaretes y la ornamentada caligrafía islámica en su interior le dan la bienvenida a los miles de visitantes que recorren la ciudad cada mes.
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Periodista. Licenciado en Ciencias de la Comunicación, actualmente se desempeña como redactor del núcleo de audiencias. Interesado en deportes, lucha libre y entretenimiento.