Se sabe que la pizza es un plato rápido de hacer y que, por lo general, gusta a toda la familia, pero no por eso significa que sea fácil de preparar porque hay una serie de recomendaciones a seguir para que la masa esté en su punto y con un sabor inigualable. ¿Quieres saber qué cosas evitar para que salga de la manera correcta? Aquí en Mag te lo contamos.
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Los errores más comunes al preparar una pizza casera
Supervisar la temperatura y amasar bien la masa son aspectos a tomar en cuenta para no estropear la pizza casera.
La masa
De acuerdo al portal La Vanguardia, hacer uno mismo la masa es el gran secreto para que la pizza quede 10 puntos. No tendrá el mismo sabor a una congelada o precocinada.
Asimismo, el truco también está en saber elegir las harinas. Según el medio citado, la harina blanca básica ofrece más plasticidad, estructura y elasticidad, a comparación de las harinas combinadas.
No amasar lo suficiente
Así como se precisó la importancia de la harina, también es clave amasar bien lo suficiente. Para ello se debe colocar la harina en un recipiente o bol, después calentar un poco de agua para deshacer la levadura y agregarla a la harina.
Posteriormente, incorpora el resto de agua y procura amasarlo del centro hacia afuera. Un truco de la abuela: haz una pausa de 10 minutos entre amasado y amasado.
El tomate
Otro aspecto a considerar y que muchas personas cometen es la posición del tomate. Según el portal Cienradios, si le ponemos mucha salsa de tomate durante la preparación, hará que la masa quede húmeda y no se ablande. Por ese motivo, se aconseja 100ml para cada 250 gramos de masa.
Temperatura
La temperatura es otro punto a tomar en cuenta. Lo ideal es que la temperatura sea alta o de lo contrario, en una acción en frío, la pizza estará seca, así lo apunta La Vanguardia. El precalentado a 250 grados y cocinarlo entre 12 a 16 minutos. Asimismo, que la masa esté en temperatura ambiente.
Queso
En este apartado, lo recomendable es colocar la mozzarella cortada en finas rodajas y distribuirlas sobre la mesa. Además, procura no usar más de cuatro variedades o de lo contrario no se podrá distinguir los sabores.
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