Tremendo fue el susto que se llevó Ann Mathers, de 88 años, al caminar por su jardín y encontrar restos óseos humanos tirados en el suelo.
La mujer, de Dudley, Inglaterra, había estado viviendo 60 años allí y jamás le había ocurrido algo así, por lo que llamó a las autoridades.
El primer encuentro se produjo en julio de 2021, cuando descubrió un cráneo humano en el jardín de su vivienda. El hallazgo produjo que la policía acordone el sitio al creer que se trataba de una escena del crimen.
Los investigadores descubrieron pronto que los culpables eran un grupo de tejones que solían escarbar en un cementerio ubicado cerca de la casa de Mathers.
Video de restos óseos hallados en la casa de Ann Mathers
Los animales habían estado usando un sendero localizado entre la vivienda y el cementerio para mover los huesos.
“Este problema ha estado ocurriendo durante un año y mi madre está harta. Los tejones están cavando túneles debajo de las tumbas y cuando se encuentran con una que se ha derrumbado, sacan los huesos y los tiran en su jardín”, dijo Lorraine Lloyd, hija de Ann.
A pesar de las súplicas de Ann y su familia, el Ayuntamiento Metropolitano de Dudley no ha podido hacer mucho para solucionar el problema pues se trata de una especie que se encuentra “protegida”.
Mientras tanto, las autoridades esperan contar con la asesoría de un ecologista para que los ayude a lidiar con los animales.