Los dolores en la espalda suelen ser muy comunes en la mayoría de las personas, pero en ocasiones puede ser indicio de algo más grave. Eso fue lo que ocurrió con Carl Scott, un joven del Reino Unido de 19 años que fue diagnosticado con cáncer tras ser revisado por un médico. Debido a que su enfermedad había avanzado vertiginosamente, falleció al cabo de tres semanas.
El británico Carl Scott tenía 19 años y todo un futuro por delante, sin embargo su vida cambió radicalmente tras acudir a un centro médico por un dolor de espalda aparentemente inofensivo.
En el verano del 2022, el joven sintió dolores en su espalda y luego se dio con la sorpresa que había aparecido un bulto en esa parte de su cuerpo, según indica Univisión. Además de estas desconcertantes señales, Scott había bajado de peso, por lo que acudió al hospital de Freenman en Newcastle, Reino Unido.
Debido a los síntomas, los médicos pensaron inicialmente se trataba de un cáncer testicular, pero luego de realizar varias pruebas descubrieron que lo que tenía era causado por un tipo de sarcoma de tejido blando denominado rabdomiosarcoma alveolar.
Según explica Mayo Clinic, el rabdomiosarcoma (RMS) “es un tipo raro de cáncer que se forma en el tejido blando, específicamente en el tejido muscular del esqueleto o, a veces, en órganos huecos, como la vejiga o el útero”. En su fase inicial no presenta síntomas, pero la presencia de un bulto en el cuerpo puede ser un indicador.
Los sarcomas de tejido blando pueden ocasionar esos bultos que crecen de manera progresiva, de acuerdo con el Servicio Nacional de Salud del Reino Unido (NHS por sus siglas en inglés), aunque precisa que en la mayoría de los casos esto puede deberse a quistes benignos o lipomas.
“Pocas semanas de vida”
Luego de comunicarle a su familia el desolador diagnóstico Chronicle Live y su pareja se dieron cuenta que se trataba de algo “malo”,
“Fue al hospital por dolores de espalda, así que escuchar que tenía cáncer fue un gran shock. Estaba realmente afectado, no tuvo tiempo para procesarlo realmente. Le rompió el corazón”, dijo Claire Abraham, la madre de Carl, al medio británico Chronicle Live.
Lamentablemente, en septiembre del 2022 los médicos le dieron conocer al joven y a su familia que el cáncer había hecho metástasis en varias partes del organismo, incluyendo el cerebro, y que le quedaba pocas semanas de vida.
“Todavía no parece real”, admitió recientemente la afectada madre, al recordado a su hijo fallecido.
“Era todo un personaje, solía hacerte reír todo el tiempo. También era cariñoso y afectuoso. Era un niño al aire libre. Siempre quería salir con sus amigos”, agregó.