La reina Isabel II de Inglaterra murió este jueves a los 96 años después de un reinado de 70 años, anunció este jueves el Palacio de Buckingham. Ahora su hijo, el príncipe Carlos, se convertirá en el nuevo rey.
“La reina murió en paz en Balmoral en Escocia esta tarde. El rey y la reina consorte permanecerán en Balmoral esta noche y regresarán a Londres mañana”, señala el comunicado difundido por la mencionada institución.
Poco antes del anuncio, llamó la atención de quienes transitaban por el palacio la aparición de un arcoíris, un acontecimiento que, en ese momento, fue visto por algunas personas como un “soplo de esperanza”.
¿Por qué un arcoíris es visto como un símbolo de esperanza?
Detrás de un arcoíris hay más que una explicación científica, pues se trata de un fenómeno con un gran simbolismo, cuyo significado tiene una relación espiritual y social.
Técnicamente, los arcoíris son rayos de luz fragmentados a través de las gotas de lluvia que hay en el ambiente; sin embargo, espiritualmente representan un nuevo comienzo para aquellas personas que se encuentran librando una lucha.
Hablando de forma religiosa y espiritual, un arcoíris representa la ascensión espiritual y la divinidad. Según el portal soyaire.com, para el budismo tibetano los colores representan la ascensión del alma a la luz celestial. Dicho de otra forma, representa que el cuerpo de una persona llegue más allá del plano terrenal para convertirse en una luz que se esparce en el cielo.
Para el cristianismo, un arcoíris representa un mensaje angelical de los seres queridos que ya no están entre nosotros. Son vistos también como caminos o guías de los espíritus para dar un mensaje de aliento y positivismo.