Los canes más jóvenes son captados y promocionado en las redes sociales de Dame Una Patita de Amor. Con el fin de conseguirles hogares responsables y reducir la población de animales abandonados. Foto / Julio Reaño / @photo.gec
Acompañados siempre de uno a más canes, los voluntarios se dirigen por diferentes lados de Nueva Esperanza en Villa María del Triunfo . Foto / Julio Reaño / @photo.gec
Con diferentes tareas asignadas, Una Patita de Amor prepara su famoso ¨caldito especial¨ que será entregado a todo can necesitado que deambule por la zona. Foto / Julio Reaño / @photo.gec
En su recorrido, los voluntarios también examinan que los canes estén en buenas condiciones. En caso contrario son llevados al veterinario para tratamiento y recuperación Foto / Julio Reaño / @photo.gec
Jóvenes estudiantes de Nueva Esperanza, organizaron el accionar de cocinar, rescatar y ayudar a cuadrúpedos (en su mayoría perros) de su sector. Foto / Julio Reaño / @photo.gec
El tan esperado ¨Caldito Especial¨ es entregado a los canes callejeros encontrados en el camino, algunos ya son conocidos como "Gemelita" que saca su lengua saboreando la sopa y su amigo Rubio. Foto / Julio Reaño / @photo.gec
Algunos cuadrúpedos que han crecido solos sin interacción humana por los cerros de Villa María encontrándose en un estado salvaje. Los voluntarios llegan a ellos solo para repartir alimentos dado que en su condición silvestre es imposible tener alguna interacción. Foto / Julio Reaño / @photo.gec
Según la Organización Voz Animal, solo en Lima metropolitana habría una población de cuatro millones de canes abandonados a su suerte. El papel que tienen las municipalidades para poder solucionar el problema ha sido escaso. Foto / Julio Reaño / @photo.gec
Una Patita de Amor. El voluntariado está tomando cada vez más fuerza en la zona de Nueva Esperanza, contando con un total de quince participantes que llevan ayuda a todo can abandonado en su sector. Foto / Julio Reaño / @photo.gec
María de los Ángeles Belén Román Narva, joven técnica en Contabilidad y Finanzas es la presidenta de la organización que junto a los voluntarios sueñan con ser un gran Albergue de Mascotas en Lima. Foto / Julio Reaño / @photo.gec