Zulma, Martita, Estela y Raquel, cuatro “señoras de alcurnia”, se reúnen cada semana en casa de una de ellas para tomar el té, compartir chismes, entre tragos, burlas y más. Una tarde de tantas, algo cambiará en sus vidas cuando un crimen las sorprenda en medio de la habitual velada. A partir de entonces, el cuarteto se convertirá en juez y parte de un bizarro juicio y a través de un improvisado tribunal casero delatarán sus más oscuros secretos.
Esta es la premisa de “Tarascones”, la adaptación peruana de la obra argentina escrita por Gonzalo De María, actualmente en funciones en el Teatro La Plaza.
Dirigida por Paloma Reyes de Sá y protagonizada por Gisela Ponce de León, Claudia Berninzon, Yiddá Eslava y Gabriela Luna (REIINA), esta pieza teatral es un retrato en tono de comedia, de una sociedad marcada por la discriminación, hipocresía, el racismo, el clasismo, entre otras taras sociales.
La noche va cayendo y las actrices llegan a La Plaza entre las 5:30 y 6:00 pm. La primera en pisar el teatro es Gabriela Luna (REIINA) La actriz y clown es la única del grupo en repasar el texto en el escenario, un par de horas antes de cada función. Mientras eso pasa, Claudia Berninzon, Yiddá Eslava y Gisela Ponce de León entran al camerino.
Muy cerca, en un comedor acondicionado para el elenco, las actrices se sirven algo caliente para beber, conversan algo entre ellas y luego no pasa mucho tiempo para que empiecen su rutina de caracterización.
Yiddá y Claudia son las primeras en comenzar a maquillarse pero Gisela y Reiina no tardan en hacer su parte. Ya con las cuatro juntas en el camerino, el ambiente que se vive ahí adentro es de relajo, juego y música. La voz de las actrices se escucha cada vez menos, y es que Martita, Zulma, Estela y Raquel van tomando forma y se torna inevitable que se adueñen de la situación.
“La importancia de jugar, día a día”
Sobre este momento que vive el elenco antes de salir al escenario, Paloma Reyes de Sá, en conversación con diario El Comercio, habla de lo importante que es este “espacio de juego previo a empezar la función”.
“Jugamos mucho... es como ir calentando los motores para que cuando (las actrices) entren en ese trance teatral ya estén dentro del ‘mood’ del juego que les va a permitir divertirse a pesar de cualquier dificultad que pueda suceder dentro de la función, incluso si es un público difícil, el hecho de que estén en estado de juego, va a ser que todo fluya mejor”.
“Siempre hay algo que mejorar”
Paloma apunta también a la importancia de mejorar diariamente siempre algo de la obra. Durante la previa en el camerino, la directora brasileña revisa sus notas y es en este momento donde aprovecha para corregir esta o aquella escena.
“Todos los días de función nos reunimos y les doy notas de cosas que percibí de la función que pueden mejorar. Y yo siempre hago eso. Nunca dejo de dar notas porque pienso que siempre se puede mejorar algo que no vi, algo que ellas no se dieron cuenta. Y probablemente la función vaya mutando y vaya mejorando. Y de una temporada a la otra siempre sucede eso, las obras van mutando. Es bueno hablar de lo que hay que mejorar porque si lo dejas pasar siento que tiende a caer la calidad del producto. Creo que para que las cosas salgan bien siempre hay que hablar de lo que sale mal”.
Hablan las actrices
Conocida por su exigencia en el trabajo pero también por lograr sacar lo mejor de cada actor, el trabajo como directora de Paloma es reconocido por las cuatro protagonistas de la obra.
“Estoy feliz con ella. Quiero trabajar un montón de veces más con ella y aprender de ella. Tiene muchos talentos, mucha humanidad. Cree en sus actores, cree que son capaces de hacer magia y la ves tan segura que a ti solo te queda creerle... Viene siendo una experiencia muy bonita y espero que se repita muchas veces...”, nos dice Gisela Ponce de León mientras termina con el maquillaje de Martita.
Yiddá coincide con Gisela en calificar el trabajo de Paloma: “Es talento puro, pero lo más lindo que tiene es una sed de dar, enseñar, calar en ti de una forma positiva. Son de esas personas que te dejan huella, y cuando la recuerdas, dibuja una sonrisa en tu boca. Con eso no digo que sea dulce, para nada ¡jajaja! es recta y muy exigente, pero justamente para mí esas son las personas que realmente quieren que brilles”.
Cuando el azar, las dificultades y la magia se juntan
Paloma califica “Tarascones” como la obra más difícil que le ha tocado ensayar en su vida. Esto debido a las dificultades que se presentaron en el camino.
“Llegó el texto a nuestras manos, tuvimos el primer ensayo que era un laboratorio. Porque empezamos siempre haciendo un laboratorio y una actriz se rompe el pie (Claudia Berninzon). Entonces tuvimos que parar los ensayos presenciales y volver a hacer lectura por zoom para que ella esté. Por eso el personaje tiene un bastón... Cuando ella se reincorpora, Yiddá tiene riesgo de Covid y de ahí tuvo el lanzamiento de su película y no podía venir a los ensayos. Cuando ella vuelve, yo me contagio de Covid y tengo que hacer cuarentena por tres semanas ¡jajaja!. Entonces yo tuve que dirigir por Zoom con la ayuda de Carol Hernández, mi asistente de dirección”.
La directora revela también que el proceso de elegir a las actrices nace en primera instancia de lo que a ella se le ocurre tras leer el guion. Paloma nunca había trabajado ni con Gisela, ni Claudia ni con Yiddá, solo con Gabriela, su alumna de clown. Ella explica que en cada obra suya, los actores que convoca van botando material e improvisaciones, lo que les permite descubrir quién es quién.
“Pasó mágicamente en esta obra que vinieron las actrices a mi casa a hacer una primera lectura e intuitivamente les di un papel a cada una. Es un primer paso en el que les doy los papeles, y vemos cómo les va, cómo se sienten, si les gusta o no, si quieren intercambiar el papel. Vamos probando. Pero ese día les dije: tú haces tal y tal y al día siguiente me escriben: ¡Oye, Paloma! ¿Tú sentiste lo que sentimos nosotras?”, refiriéndose a que cada una se sintió a gusto con el papel que finalmente vemos que interpretan.
Durante la charla, Claudia Berninzon interviene y revela que a ella le costó mucho, en un principio, encontrar a Estela. “Hicimos una pasada general y yo terminé sintiéndome de lo peor, desalentada, desmotivada, porque me sentí pésimo. Sentí que no había encontrado al personaje pero al día siguiente me senté con Carol, conversamos un ratito, hicimos unas pruebas, unos ensayos y ¡Plim! ahí estaba Estela, este ser hermosamente horrible”.
Gabriela Luna (REIINA) por su parte, recuerda que para ella también fue difícil el proceso dada su formación como clown. “Fue muy duro al comienzo, tuve que aprender técnicas de actuación en el camino. El proceso fue doloroso, lloroso pero lleno de perseverancia, todos los días ensayar, practicar e incluso ejercitar el cuerpo porque esta obra además de ser exigente en el guion también lo es físicamente...”.
La también cantante nos explica porqué, a diferencia de sus compañeras, repasa el texto antes de cada función. “Me ayuda a calentar voz, cuerpo, y sobre todo activar la memoria porque el guion no es nada fácil. Como me dijo una de mis compañeras, cada quien encuentra su método, creo que este es el mío”.
Un tema que incomoda
Conversando sobre la temática de “Tarascones”, Paloma es clara en decir que la obra “nos friega en la cara lo que hay aún de tufo racista y clasista en todos nosotros”.
“Y es horrible verlo. Pero como está tocada con humor nos desarma y empezamos a recibir la información de manera más amable, a pesar de ser tan atroz. Y lo que buscamos es justamente encontrar los prejuicios que aún existen en nosotros para transformarlos y esto se logra incomodando. Porque el racismo y el clasismo tienen que incomodar al racista y al clasista y el arte tiene ese poder y eso paso también con nosotras durante el proceso: ‘Como voy a decir eso que incomode pero que no genere tanto rechazo’, se preguntaban las actrices. Es una obra muy difícil de hacer, al menos acá en Perú”.
Tercera llamada. La sala está casi llena y es momento de gritar el famoso ¡Mierda! Sin embargo, Gisela no quiere dejar de mencionar cómo viene siendo la reacción del público.
“Al público le pasan dos cosas. O se divierten mucho porque piensan que han visto algo bravazo o están incómodos porque supongo que algunas personas no les gustará pero ambas reacciones son para mí correctas. Esta obra está hecha para hacer reír, para entretener, para sorprender y para incomodar sobre todo, porque llega un momento en que no sabes de que te estás riendo. Si estás con tu risa, avalando lo que están haciendo los personajes en escena o no. Eso es lo interesante del teatro, que a cada uno lo mueve distinto. Es una experiencia y un viaje siempre. Hay mucho trabajo detrás, mucho estudio así que la respuesta del público corresponde a eso”.
-El accidente que sufrió Claudia Berninzon no fue una fractura de pierna sino de pie. Se dobló el tobillo, tuvo un esguince de cuarto grado y se rompió un metatarso.
-En todas la obras en las que ha actuado Claudia, dos o tres segundos antes de entrar al escenario, se le bloquea la memoria y su cábala es siempre tener el guion al costado, así no lo abra. Una vez que entra al escenario, recuerda automáticamente todo.
-Yiddá tiene la costumbre de tomar siempre un café con leche sin azúcar, antes de salir al escenario. Otra manía es hacer que ella y sus compañeras se paren en el mismo lugar para hacer el "mierda".
-Reiiina está próxima a presentar su álbum de nombre REIIINA, un proyecto de música indie donde además de cantante, es la compositora de los temas.
-Tarascones significa cuando un animal muerde, clava los dientes a una persona y otro animal.
LA FICHA
TARASCONES / OBRA DE TEATRO
TEATRO LA PLAZA
Horarios: jueves a sábado 8:00 p.m. domingos 7:00 p.m.
Duración: 75 minutos
PRECIOS ESPECIALES:
ESTUDIANTE: 28 soles ingresando el código «ESTUDIANTE»
ADULTO MAYOR: 40 soles ingresando el código «ADULTOMAYOR»
LUNES POPULAR: 45 soles ingresando el código «LUNESPOPULAR»
CONADIS: 40 soles ingresando el código «CONADIS»