Para algunos, la estadounidense Judy Garland es la dulce Dorothy de “El mago de Oz”. Para otros es Ally de “Star Is Born”. Sin embargo, ella fue mucho más que una actriz; su poderosa voz y talento la convirtieron en un ícono de Hollywood. Renée Zellweger se encarna en su piel en la nueva película biográfica “Judy”, esta interpretación le ha valido un Globo de Oro, un Bafta y un casi seguro Oscar la noche de este domingo.
► Renée Zellweger se transforma en Judy Garland para nuevo filme
Ambientada en el año 1969, “Judy” se centra en un momento específico de la vida de la cantante, cuando llega a Londres para una serie de conciertos durante cinco semanas.
Su vida estuvo llena de altas y bajos. A continuación, te contamos la historia que no verás en la película que podría darle su segundo Oscar a Renée Zellweger.
Al inicio del camino amarillo
Judy Garland nació en 1922 bajo el nombre Frances Ethel Gumm, en Michigan, Estados Unidos. La joven adolescente logró firmar un contrato con MGM (Metro-Goldwyn-Meyer) a los 13 años para ser parte de la compañía durante 7 años.
Al formar parte de MGM, la joven pasó a llamarse Judy Garland. La adolescente fue maltratada y explotada como un objeto durante este tiempo. Podía trabajar cerca de 16 horas al día rodando películas y musicales, no se le permitía tener una vida normal y mucho menos una propia.
La compañía creaba situaciones como una cita o un cumpleaños “feliz” para mostrar fotos a las revistas de la época para demostrar que esta estrella emergente de Hollywood “tenía una vida normal”.
La fama de Garland creció cuando formó parte del clásico del cine “El mago de Oz” (1939), sin embargo, la promoción del musical impidió que la joven terminara sus estudios en la secundaria. La actriz tenía 17 años cuando cantó por primera vez “Somewhere Over the Rainbow”, y su vida, para bien o para mal, quedó marcada por este tema.
Hollywood, el abusador
La método del star-system, contratar a una estrella jóven durante varios años, fue muy utilizado por los grandes estudios de Hollywood entre las décadas de los 30 y 50. Ellos se encargaban de “criar” a la estrella desde muy pequeña, le cambiaban el nombre y la contrataban durante años.
El contrato inicial de Garland fue por siete años, luego se extendió por casi ocho años más. Durante estos casi 15 años, la actriz estadounidense protagonizó 30 películas con MGM.
Desde los 13 años, estuvo a dieta por orden de MGM. Esta consistía en alimentarse de sopa, lechugas, 80 cigarrillos diarios (para reprimir su apetito), anfetaminas (para poder trabajar 16 horas al día) y barbitúricos (para dormir).
El abuso también fue psicológico. Cuando tenía 14 años un ejecutivo de MGM la definió como “una pequeña cerda con coletas". La joven adolescente estaba presente en la habitación cuando ocurrió. En varias ocasiones, mientras intentaba mejorar su apariencia, el presidente del estudio, Louis B. Meyer, la llamaba cariñosamente “mi pequeña jorobada”.
Cuando cumplió 15 años el productor de la cinta “La melodía de Broadway” (1938) la insultó diciendo que “parecía un monstruo bailando”.
Su madre, Ethel Gumm, fue quien la introdujo por primera vez a las drogas, según Gerald Clarke, autor de la biografía de la Garland “Get Happy”. La madre de la estrella le daba píldoras para trabajar alegando: “¡Tengo que lograr que esta chica salga adelante!”
Cuando cumplió 17 años y entonó la canción que la volvió famosa a nivel mundial y a través de los años, según explica su biógrafa, podría haberlo tenido todo, incluso la libertad. Su voz visceral y poderosa era una de las mejores de la época, pero MGM (o Hollywood) se encargó que ella no supiera del gran talento que tenía. Les convenía tenerla sumisa e insegura.
La joven estadounidense se convirtió en una estrella de Hollywood triste, que películas tras película solo buscaba ser aceptada y querida por el público.
Tras conocer su biografía y al escucharla cantar “Somewhere Over the Rainbow”, es difícil volver a ver a Dorothy de la misma manera. Las letras de la clásica canción se convierten en un himno de la pequeña estrella: “Algún día pediré un deseo a una estrella, despierta donde las nubes están lejos detrás de mí, donde los problemas se derriten como las gotas de limón”.
Garland se convirtió en la compañera de reparto de Mickey Rooney, con el cual hizo varias cintas. Para el estudio MGM, la joven actriz no era lo suficiente bella o sexy. Durante ese tiempo no podía tener novio. Una de las cláusulas del contrato que tuvo con MGM indicaba que no podía citas o acudir a fiestas.
La actriz se volvió inestable por las drogas que consumía, lo que hizo que el estudio MGM la suspendiera varias veces por estar ausente en los rodajes o por estar intoxicada. La estrella de Hollywood cayó en depresión y tuvo problemas financieros.
No hubo amor
Garland tuvo cinco matrimonios. La primera vez que contrajo matrimonio fue a los 19 años, cuando se fugó a Las Vegas con el músico David Rose. Al cumplir 20 quedó embarazada, pero su madre la convenció a abortar para poder continuar con su carrera. Un año después, se divorció de Rose.
Dos años después de su primer divorcio se casó con Vicente Minelli, su director en la película “Cita en Saint Louis”. Con él tuvo a su primera hija, Liza Minelli, conocida actriz. Pero sus crisis nerviosas continuaron.
Intentó suicidarse en numerosas ocasiones, y terminó internada en una clínica psiquiátrica. Fue sometida a tratamientos de electroshock para superar la depresión.
“Quería apagar las luces en mi pasado y también en mi futuro. Quería herirme a mí misma y a todos los que me habían herido”, contó años después sobre sus intentos de suicidio.
Finalmente, a los 28 años, MGM la cambió por Ginger Rogers en “The Barkleys of Broadway” (1949). Durante casi seis años estuvo sin tener éxito en el cine, esto la hundió más en depresión.
La estrella empezó hacer shows en vivo. Vi un nuevo inicio para ella y para sus hijos, estaba en la quiebra. Garland hizo giras en Estados Unidos y en Europa. Además, logró ganar cuatro Grammys. Fue la primera mujer en la historia en ganar este galardón.
La luchadora Judy Garland, en una segunda nota nos explayaremos sobre el por qué de este adjetivo, falleció en junio de 1969 por una sobredosis accidental de barbitúricos al terminar su gira por Londres. Su historia merece ser contada, porque los abusos de las productoras y de los malos padres siguen ocurriendo, y Renée Zellweger hace una maravillosa interpretación de Garland en “Judy”.
Más noticias del Oscar
- “1917”, la película que jamás debes ver en Netflix y que podría ganar el Oscar
- Oscar 2020: ¿Ya todo está consumado para Joaquin Phoenix y Scarlett Johansson?
- Oscar 2020 y la temporada de premios: mira como va quedando la tabla de galardones
- Oscar: victoria de “1917” en los PGA reafirma que Netflix está lejos del premio mayor
- Oscar 2020: PGA y SAG Awards, ¿predicen estas ceremonias quién ganará en la gala de la Academia?