Ángel Navarro Quevedo

Siguiendo las aventuras de Alegría, Tristeza, Furia, Temor y Desagrado, la secuela de nos sumerge en un nuevo desafío para este grupo de emociones: la pubertad. La nueva etapa en la vida de Riley viene acompañada de personajes nuevos como Ansiedad, Vergüenza, Envidia y Aburrimiento (Ennui), quienes intentarán comprender y lidiar con los desafíos que surgen a lo largo de la película animada.

Si bien esta continuación cuenta con nuevos personajes, otros quedaron fuera, como es el caso de la emoción de Shame, descartada en preproducción debido a que tendría muchas similitudes con Vergüenza. Sin embargo, hay otro personaje que tampoco llegó a aparecer en la cinta. “Era esa otra emoción que sientes cuando te alegras de que le pase algo malo a otro, se llama Schadenfreude. Tendría un acento alemán y sería realmente divertido, golpeando la cabeza de algunos personajes para reírse, pero tuvimos problemas para entender por qué esa emoción específica necesitaba aparecer en la vida de Riley en este momento”, cuenta Mann. “Aún creo en ese personaje, y tiene potencial para aparecer en una siguiente cinta”, agrega.

Los nuevos sentimientos en Inside Out 2: Vergüenza, Ansiedad, Envidia y Aburrimiento (Foto: Disney/Pixar)
Los nuevos sentimientos en Inside Out 2: Vergüenza, Ansiedad, Envidia y Aburrimiento (Foto: Disney/Pixar)
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Para terminar de comprender la narrativa concebida originalmente por Pete Docter, director de la primera entrega, Kelsey Mann se embarcó en el desafío de entender esta historia, buscando inspiración en sus propios hijos adolescentes, dándole un tono paternalista a la película que va acorde a la transición de Riley hacia la adolescencia. Contó con la guionista original Meg LeFauve y mantuvo las voces de Amy Poehler (Alegría), Phyllis Smith (Tristeza) y Lewis Black (Furia). Sin embargo, para Mann aún faltaba un filtro más que lograra adentrarse en la cinta y, aún más importante para él: complejidad de una de las etapas más cambiantes del ser humano.

“Se nos ocurrió la idea de tener un panel asesor de chicas adolescentes que llamamos ‘El equipo de Riley’, un grupo de nueve adolescentes entre las edades de 13 a 16 años. Grabábamos las escenas y obteníamos su opinión sobre cómo estaba quedando la historia que queríamos contar -revela Mann en una entrevista con El Comercio-. Cuando teníamos toda la cinta lista, mostramos las distintas versiones de la película a este equipo para saber que esta sería una muy buena película”.

"Intensamente 2" regresa a la mente de la ahora adolescente Riley justo cuando la sede central está sufriendo una repentina demolición para dejar espacio a algo completamente inesperado: nuevas emociones (Foto: Disney/Pixar)
"Intensamente 2" regresa a la mente de la ahora adolescente Riley justo cuando la sede central está sufriendo una repentina demolición para dejar espacio a algo completamente inesperado: nuevas emociones (Foto: Disney/Pixar)
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A toda lágrima

Además de pensar en una buena película, las cintas de Pixar son reconocidas por generar las llamadas “escenas lacrimógenas”, un momento meticulosamente elaborado donde se provoca una ola de lágrimas en las salas de cine. La nueva entrega “Inside Out 2″ no es una excepción a este recurso narrativo que ha sido una constante en las películas de animación más populares desde hace tiempo.

Existen numerosos ejemplos de cuán recurrentes son estos momentos, como la despedida final de Andy hacia sus juguetes en “Toy Story 3″, la conmovedora historia de amor de Carl Fredericksen en “Up”, la emotiva canción “Recuérdame” interpretada por Miguel hacia su bisabuela en “Coco”, o la muerte de Wall-E y su posterior “pérdida” de memoria en la cinta homónima “Wall-E”.

La secuela de "Intensamente" -también conocida como Inside Out (2015)- está siendo dirigido por Kelsey Mann y mantiene a la guionista original Meg LeFauve (Foto: Disney/Pixar)
La secuela de "Intensamente" -también conocida como Inside Out (2015)- está siendo dirigido por Kelsey Mann y mantiene a la guionista original Meg LeFauve (Foto: Disney/Pixar)
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“Buscamos crear una experiencia emocional para el público, algo que ocurrió con la primera película y que es una característica común en las historias de este tipo. En este caso, encaja perfectamente porque estamos tratando con una película sobre emociones. Tenía que ser profundamente conmovedora”, nos cuenta el director de la película, Kelsey Mann. “Esta es la película número 28 y la clave de todo es la historia; es honestamente el punto donde queremos darle más importancia”, menciona Mann.

Además de esta característica distintiva, hay otros aspectos que deben considerarse al crear una película de este calibre, especialmente si lleva el sello de Pixar o Disney, una vara que cada vez se pone más alta. “El término ‘desafiante’ resume bien el proceso de elaborar estas películas. Uno debe equilibrar múltiples elementos para asegurarse de que la película sea entretenida y atractiva para la audiencia, sin sacrificar la profundidad emocional”, concluye.

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