Mientras la policía desalojaba el miércoles a miles de ciudadanos que ocupaban de manera ilegal el Morro Solar, el Ministerio de Cultura, la Policía Nacional y la Municipalidad de Lima efectuaban una inspección en el cerro San Cristóbal, en el Rímac, debido a que en la zona se han advertido nuevas invasiones.
El Comercio observó que en el área conocida como Boca de León se han levantado decenas de viviendas, algunas de ellas de madera y triplay; otras, de material noble, cuentan con tanques para el abastecimiento de agua.
“Ya los habíamos desalojado de acá antes, en el 2019, pero se han vuelto a meter. Hace poco, en marzo, nos hemos llevado picos, lampas y palos”, relataron a este Diario funcionarios de la Gerencia de Seguridad Ciudadana del municipio del Rímac.
Además, estas personas han comenzado a construir nuevas pircas en la pendiente con el fin de levantar más viviendas. “Como ves, entre la quinta y sexta cruz [del cerro] ya se está trabajando el terreno para que vengan nuevas invasiones”, añadieron los representantes de la comuna distrital.
Los especialistas de la Municipalidad de Lima que participaron en la inspección han recomendado “liberación inmediata de estas áreas”, puesto que el cerro San Cristóbal forma parte de la Zona Monumental del Rímac.
Fuentes del municipio informaron que este lugar tiene la condición de zona de recreación pública (ZRP), por lo que la construcción de viviendas está prohibida. El cerro San Cristóbal, un ícono de la capital, está protegido por la Ley General del Patrimonio Cultural de la Nación (La Ley 28296).
Además, se comprobó que las construcciones son peligrosas para sus ocupantes, pues están asentadas sobre una ladera. Las invasiones no son un fenómeno reciente en este cerro: la ocupación ha continuado a lo largo de los años.
Metros más abajo, en la zona de Villa Fátima, a la altura del Club Internacional Revólver, el panorama se similar: al menos 30 viviendas instaladas sin autorización.
“La gente ha estado viniendo desde el 2019 y avanza poquito a poquito”, añadieron los funcionarios de la Municipalidad del Rímac.
El Comercio consultó al Ministerio de Cultura respecto de esta inspección, pero al cierre de esta nota no había respuesta.