En la habitación, no cesa el traqueteo de las máquinas de coser. Los costureros, distribuidos en dos hileras, tienen la mirada puesta fijamente en los trozos de tela que vienen cosiendo en sus máquinas. Esa concentración solo se quiebra cuando alguien ingresa al cuarto, y alguno de ellos levanta la mirada para saber de quién se trata, y cuando alguien –rara vez- voltea para comentarle algo al compañero de al lado.
No son los únicos. En el mismo espacio, pero ubicados metros más allá, otro grupo de trabajadores se encarga alrededor de una mesa de metal de quitar los hilos sueltos de las prendas confeccionadas, y alistar los productos para su envío. En una mesa contigua, un trabajador realiza los cortes de las telas y los elásticos, para suministrarlos a los costureros.
El lugar está ubicado dentro del Complejo Deportivo San Cosme, en donde desde el 31 de marzo viene funcionando un taller de confección de mascarillas, con el aval y el impulso de la Municipalidad de La Victoria. El propósito no puede ser más noble: confeccionar estas prendas para proveerlas de manera gratuita a las personas con escasos recursos.
La idea del taller fue de la figura de la TV y empresaria textil Alejandra Baigorria. “Estaba en mi casa, con mucho tiempo para pensar (por la cuarentena), y me dije: tengo las máquinas, la mascarilla es una cosa fácil de confeccionar. Comencé a buscar los tipos de tela que podían funcionar para confeccionar las mascarillas, luego el Minsa -justo después de que yo ya abrí el taller y todo-, mandó las características (que deben tener los tapabocas), y comenzamos a confeccionar las mascarillas, tal cual las indicaciones del Minsa”, señala.
Baigorria se puso en contacto con el alcalde George Forsyth y le propuso la idea. Fue así que el alcalde, de inmediato, dispuso el funcionamiento del taller en el Complejo Deportivo San Cosme. De esta manera, el ambiente en donde se realizaban los talleres de deportes y cultura hasta antes de la pandemia del coronavirus, se transformó en el taller de confección de mascarillas.
“Si nosotros (el distrito de La Victoria) contamos con el emporio textil más importante de toda Sudamérica, ¿cómo los empresarios textiles no se iban a hacer presente para la fabricación de estas mascarillas, para entregárselas de forma totalmente gratuitas a las personas con escasos recursos?”, se pregunta Forsyth.
“Es por eso que los empresarios de Gamarra han donado algunos rollos de tela. Acá (se refiere al taller) también vemos a unos empresarios independientes, quienes vienen y ponen su tiempo y mano de obra para crear estas mascarillas”. Luego añade: “Principalmente, este taller ha sido posible gracias a Alejandra Baigorria, porque gran parte de toda la maquinaria y personal es de su taller, y ella está haciendo esta donación para toda la población”, añade.
En efecto, el taller de mascarillas funciona con la maquinaria y el personal de AB Grupo empresarial, la empresa de Alejandra Baigorria y cuyo local ahora permanece cerrado en el emporio comercial de Gamarra por la cuarentena por el COVID-19.
Hace unos días, un segundo grupo de empresarios textiles se sumó al trabajo con mano de obra y sus máquinas de forma gratuita. Se trata de los esposos Henry Ramos y Vilma Rodríguez, Edie Alcarán y Alejandra Huamán, y los trabajadores Jhony Ramírez y Feliciano Hinostroza.
“Las mascarillas las hacemos de corazón”, subraya Henry.
“Se nos dio la oportunidad de apoyar y no lo dudamos. Aquí estamos poniendo nuestro granito de arena”, comenta Edie.
Que alguien done una mascarilla puede parecer una cosa irrelevante, pero no lo es. A raíz del coronavirus, la demanda de estas prendas se ha incrementado en el país, pues sirven para que las personas se protejan del virus. Incluso ahora el Gobierno ha dispuesto su uso obligatorio para salir a la calle en las circunstancias que la ley lo permite (no hacerlo tiene una multa de S/344). Todo ello inevitablemente ha elevado el precio de los artículos, lo que dificulta su adquisición por parte de las personas con escasos recursos.
“Hay muchas personas que están siendo infectadas por esta enfermedad, incluso hay personas que han muerto; y que (algunos comerciantes) vengan a lucrar con una mascarilla, que antes te costaba cincuenta céntimos o un sol y que ahora te la vendan a 6, 7, 8, 10 soles, me parece que ya es inhumano. Aparte de que muchas personas viven del día a día, ni siquiera están trabajando, no tienen cómo sustentarse”, comenta el alcalde Forsyth.
Agrega: “Es por eso que es tan importante la entrega de víveres a estas personas, porque les exigimos o les pedimos, por favor, ¡quédense en casa! (por la cuarentena). Pero si ellos nos salen a trabajar, no comen, no almuerzan, no cenan, y así con el resto de su familia; y menos te va a comprar una mascarilla de 10 soles. Eso es imposible, inaudito”.
La puesta en marcha del taller de mascarillas en La Victoria ha sido bien recibida también por otros distritos. “Surquillo me pidió: oye, puedes habilitarme algunas mascarillas. ¿Nos podrías donar? Perfecto, le dije. Tú tráeme los rollos de tela nomás y nosotros las producimos en el taller”, relata el alcalde Forsyth. “El alcalde de Surquillo ha venido, ha traído su tela y vamos a confeccionar sus mascarillas”, complementa Baigorria en otro momento.
“La idea es que aquí no voy a cobrar un sol por traer mi personal, por traer mis máquinas, por nada”, subraya la empresaria textil, quien añade que la Municipalidad de La Victoria no solo ha dispuesto el uso del local para el funcionamiento del taller, sino también está cubriendo los gastos de electricidad para las máquinas de coser y que por lo mismo, lo único que se requiere para producir más mascarillas son los insumos (tela, elásticos, hilos), para de esta manera “donar a todos los distritos. Que se pueda llegar a provincias, en donde -me imagino- la situación está más difícil”.
Hasta el jueves de la semana pasada, el taller había producido 10 mil mascarillas, y lo que se quiere es que también produzca otras prendas médicas muy necesarias por estos días, como mandiles, gorros médicos, entre otros.
-Hay que usar adecuadamente las mascarillas-
Según explica el médico especialista en enfermedades infecciosas y tropicales Eduardo Gotuzzo, es importante que se use las mascarillas en las circunstancias que vive el país por el coronavirus, pues “claramente reduce el riesgo” de que las personas se contagien.
“¿El uso de mascarilla en ambas direcciones, o sea, entre dos personas, protege? La respuesta es sí. De eso no tengo dudas”, afirma.
“Si la mascarilla es N95, eso hay que guardarla para el personal de salud y probablemente también ahora para la policía. Pero el resto de la población requiere mascarillas de tela, que las puedan lavar, porque no tiene la capacidad de comprar una mascarilla todos los días. Por eso, tiene que ser una mascarilla lavable cien por ciento y para eso hay que utilizar una tela adecuada”, agrega Gotuzzo.
También señala que frente a una emergencia, donde no se cuenta con los instrumentos a la mano, se debe "usar lo que tengas”. “O sea, no hay que estar discutiendo de que si [ la mascarilla de tela ] protege el 80 por ciento, el 90… es la misma discusión que hubo en la época en la que nosotros insistíamos sobre el uso del condón. Que no, que se rompe, que pasa tal cosa, esas son tonterías desde el punto de vista de salud pública. Si [con la implementación de ciertas medidas] pudiera reducir el 50, 70 o 90 por ciento (de riesgo), todas esas medidas las haría, porque vamos a contar con menos muertos”.
Finalmente, recomendó a la población usar adecuadamente estas prendas, no quitárselas o solo cubrirse la boca y no la nariz mientras está en la calle, y que junto con su utilización, las personas deben lavarse las manos. De nada sirve usar las mascarillas si luego uno se va a tocar los ojos o la boca con las manos sucias.
-La canasta solidaria de La Victoria-
Las mascarillas que se confeccionan en el taller del Complejo Deportivo San Cosme forman parte de las bolsas de víveres que viene entregando la Municipalidad de La Victoria a sus vecinos más necesitados. Además de la mascarilla, la bolsa contiene guantes, menestras, tarros de leche, arroz, fideos, hojuelas, entre otros productos. La semana pasada, 3.200 bolsas fueron repartidas, 1.300 de las cuales tuvieron como destino la calle Mendoza Moreno (Mendocita) y las otras 1.900 el jirón Renovación y los albergues del distrito. Aparte, 1.000 mascarillas fueron donadas a la Policía victoriana.
“La entrega de víveres que hemos hecho ha sido producto de todas las donaciones que hemos recibido. No ha sido el presupuesto que ha designado el Estado para la compra de estos víveres, que ya se vienen comprando y se van a entregar, pero nosotros queremos, por lo menos, empatar la misma cantidad que nos está dando el Estado”, comenta el alcalde Forsyth.
“Porque con el Estado vamos a llegar a alrededor de 6 mil a 7 mil canastas, pero 7 mil familias es muy poco en el distrito de La Victoria. Necesitamos muchísimo más. Siete mil nos lo vamos a gastar en los dos cerros (del distrito). Muchos creen que la pobreza solo están en los dos cerros, pero eso mentira”, señala Forsyth.
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¿Qué es el COVID-19?
La covid-19 es la enfermedad infecciosa que fue descubierta en Wuhan (China) en diciembre de 2019, a raíz del brote del virus que empezó a acabar con la vida de gran cantidad de personas.
El Comité Internacional de Taxonomía de Virus designó el nombre de este nuevo coronavirus como SARS-CoV-2.
¿Cuáles son los síntomas del nuevo coronavirus?
Entre los síntomas más comunes del covid-19 están: fiebre, cansancio y tos seca, aunque en algunos pacientes se ha detectado dolor corporal, congestión nasal, rinorrea, dolor de garganta y diarrea. Estos malestares pueden ser leves o presentarse de forma gradual; sin embargo, existen casos en los que la gente se infecta, pero no desarrolla ningún síntoma, precisó la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Además, la entidad dio a conocer que el 80 % de personas que adquieren la enfermedad se recupera sin llevar un tratamiento especial, 1 de cada 6 casos desarrolla una enfermedad grave y tiene dificultad para respirar, la gente mayor y quienes padecen afecciones médicas subyacentes (hipertensión arterial, problemas cardiacos o diabetes) tienen más probabilidades de desarrollar una enfermedad grave y que solo el 2 % de los que contrajeron el virus murieron.
¿Cómo se contagia el coronavirus?
El COVID-19 se contagia por el contacto de una persona sana con otra que esté infectada. Esta enfermedad se propaga de persona a persona mediante las gotículas procedentes de la nariz o boca cuando el que se encuentra enfermo tose o exhala.
En muchos casos, estas gotículas caen sobre objetos o superficies, que después tocan otros individuos y se llevan a la nariz, ojos o boca cuando pasan sus manos por la cara.