El sujeto aún no identificado que asesinó esta madrugada a una madre de familia frente a sus cinco hijos habría estado bajo los efectos del alcohol. Es más, mientras mantenía como rehén a una niña de 7 años, el desalmado hombre pidió cerveza a los vecinos y policías que acudieron al lugar del crimen.
Como se informó, Elvira Salas Collazos fue degollada frente a sus cinco hijos -de entre uno y 14 años- al interior de su habitación en la Institución Educativa N° 7087 El Nazareno, en el jirón Belén sin número, Pamplona Alta, San Juan de Miraflores. Ella laboraba ahí como guardián hace varios meses.
José Luis Esquivel León (39) es uno de los vecinos que, provistos del palo, ingresaron al colegio al escuchar los gritos de una de las hijas de la víctima. La institución colinda en su parte posterior con el asentamiento humano Prolongación Nazareno.
Según contó a El Comercio, el asesino pidió cuatro botellas de cerveza, las que le fueron entregadas con el fin de que no haga daño a la niña de 7 años que mantuvo como rehén por unas tres horas. El sujeto se propinó además cortes en las muñecas y en el cuello con el mismo cuchillo con el que degolló a Salas Collazos en la habitación que esta tenía dentro del plantel.
En tanto, el general Salvador Iglesias, jefe de la Región Policial Lima, indicó que el asesino “es un fumón de la zona” y “al parecer, estaba bajo los efectos de drogas”.
“Al parecer, habría tenido un contacto anterior con la guardiana”, acotó el general esta mañana en La Victoria, donde acompañó al ministro del Interior, Daniel Urresti, en una conferencia de prensa.