Hoy en día es muy difícil encontrar a un adolescente que no haga uso de las redes sociales. Ellos tienen muy en claro que no interactuar a través de Instagram, Facebook, TikTok, u otra plataforma, es aislarse por completo de sus compañeros y amigos. Por tal motivo, los padres juegan un papel importante para ayudar a sus hijos a navegar por estos medios con el fin de evitar efectos negativos en su desarrollo, tal como sostiene la Asociación Americana de Pediatría (AAP) en su reciente informe “Los medios de comunicación y las mentes jóvenes”.
Dicho estudio postula que los progenitores pueden establecer límites para cerciorarse de que la experiencia de los niños y adolescentes con el contenido que ven y aprecian en estos espacios sea positiva. Sin embargo, este control solo debe estar parametrado ya que prohibir su uso solo tendría un impacto mucho peor en ellos.
“Las prohibiciones per se no son formativas, son castrantes más bien. Cuando uno prohíbe, ya sea papá, mamá, o la misma escuela, está obligado en todo momento a controlar, y es imposible que podamos controlar al 100% cada minuto de la vida de nuestros hijos o estudiantes”, determinó Cecilia Zevallos, Gerente de Aprendizajes de Innova Schools, en entrevista con Hogar&Familia.
Es por ello que se debe normar su empleo para que así le puedan sacar el mayor provecho. Además, eso permitirá que, cuando encuentren algún riesgo, sepan alertar y avisar a algún adulto de confianza. “Si ellos encuentran un peligro, y están usando las redes a escondidas, en vez de decirle a un adulto responsable, se lo van a comentar a otro compañero de su edad y no van a encontrar la ayuda correspondiente y solamente este peligro se va a acrecentar”, determinó la especialista.
Es importante que los adultos estén pendientes de lo que sus hijos menores consumen en estos entornos digitales, en qué redes interactúan, con quiénes hablan, cuáles son sus hábitos, etcétera. “Todo en exceso siempre trae una consecuencia negativa. Es muy importante el tema de horarios, de conversar con ellos, de interactuar también con nuestros propios hijos dentro de estos espacios, respetando su privacidad”, agregó a este medio.
“Tengan presente que los adolescentes, como ya van marcando su propia identidad, van a querer mantener algunas cosas en reserva, por eso hay que respetar esa privacidad, pero sí estar muy atentos a cambios conductuales que ellos pudieran tener, que nos hagan sospechar de otras cosas que pueden ser más perjudiciales para ellos”, explicó.
¿Cómo sacarles provecho a las redes sociales?
Contrariamente a lo que se suele escuchar y leer, las redes sociales tienen varios aspectos positivos en los niños y adolescentes. “Gracias a las redes sociales, los chicos no perdieron su socialización y se mantuvieron en contacto durante la pandemia de la COVID-19. Si bien es cierto, no pudo ser igual que estar cara a cara, lograron mantener comunicación con sus pares. Además, descubrieron otros espacios de interacción entre ellos”, comentó la docente.
En pleno 2023, han transformado la forma en que nos comunicamos y compartimos información en línea. Aunque también presentan algunos desafíos, ofrecen una serie de beneficios significativos:
Poder de socialización
Las redes sociales nos permiten conectarnos con amigos, familiares y personas de todo el mundo. Podemos mantenernos en contacto con seres queridos, incluso si están lejos, compartir experiencias, intercambiar ideas y expresar nuestras opiniones.
“A nivel de socialización, las redes cumplen el importante rol de mantener a todas las generaciones interactuando, ya que dentro de ella podemos desarrollarnos e interactuar como en el mundo real”, dijo la experta.
Expresión personal
Ofrecen una plataforma para que los niños y adolescentes expresen su creatividad, intereses y opiniones. Pueden compartir fotos, videos, arte y escritos, lo que les permite explorar y desarrollar su identidad.
“Han descubierto una gran forma, y muy creativa, para expresarse y comunicarse. Ya no solamente a través de las palabras escritas, vídeos o mensajes de audios. Con los emojis, le han reasignado significados a una serie de gestos, objetos y caritas, son los códigos que los adolescentes manejan con gran naturalidad”, indicó.
Convertir talentos en profesiones
Muchos adolescentes, a partir de su interacción y el uso que le dan a las redes sociales y a otros entornos digitales, descubren que tienen habilidades que pueden desarrollar profesionalmente, ya sea como programadores, comunicadores, diseño, arte u otras profesiones ligadas a la creatividad.
“Las redes sociales se han convertido en una buena herramienta para que se aprenda haciendo en el campo, así ellos pueden descubrir habilidades natas para desarrollar a nivel profesional con el pasar de los años”, sostuvo.
Concientización sobre temas sociales
Las redes sociales pueden ayudar a los niños y adolescentes a tomar conciencia sobre temas sociales importantes, como problemas ambientales, desigualdad o discriminación que existen en su comunidad. Pueden unirse a campañas, organizaciones o movimientos que promueven el cambio social.
“Un reto es que se creen equipos o sociedades entre los adolescentes para que compitan entre sí en temas de investigación y aprendizaje. Esto existe, pero a nivel lúdico a través de los torneos de juegos online.
Hay cosas que de repente no se abordan a la escuela y ellos debidamente guiados podrían crear estas redes de contacto para profundizar temas para elaborar campañas de desarrollo en sus barrios o distritos”, precisó la experta.