El periodismo y sus búsquedas siempre resultan un atractivo hilo conductor para contar historias. El motivo es evidente: la labor de un periodista se puede resumir --aunque no limitar-- en la necesidad de buscar insumos para que el mundo vea aquello que a simple vista no ve. Y para ello hay que estar donde pasan las cosas. Y eso, precisamente, fue lo que movió a los fotoperiodistas Vera Lenz, Óscar Medrano y Alejandro Balaguer a trasladarse, en la década del 80, en pleno desarrollo del conflicto armado interno, a los distritos ayacuchanos más golpeados por Sendero Luminoso. Treinta años después regresaron a esos mismos lugares y su historia de encuentro y reencuentro es el hilo conductor de Volver a Ver, documental dirigido por la cineasta y productora Judith Vélez.
Volver a ver es algo así como el detrás de cámaras de la historia cotidiana que contaron los medios de comunicación de entonces y que se recogió luego en Yuyanapaq: para recordar, la exposición fotográfica que se organizó tras la entrega del Informe Final de la CVR. La premisa de la película es la siguiente: Tres reconocidos fotógrafos que cubrieron el desborde de la violencia en las comunidades ayacuchanas de Cochas, Acos Vinchos y Huaychao, durante los ochenta, retoman contacto con los protagonistas de sus retratos gracias a las gestiones del equipo del documental. Las personas que se reconocen en estas imágenes lloran al enfrentarse a ellos mismos y a su historia. Los autores, que hace 30 años sacaron del anonimato a estas comunidades al captar sus duras realidades con rostros —vaya ironía— anónimos, se enfrentan hoy al rescate de las vidas que retrataron. Les ponen nombre.
Si bien para el reencuentro se buscó a los protagonistas de seis fotografías, la producción llevó más imágenes para montar exposiciones en cada comunidad. Judith Vélez cuenta que realizó este trabajo como un ejercicio de memoria que quiere reivindicar el papel de las comunidades, desde las rondas campesinas y los comités de autodefensa, en la lucha contra Sendero Luminoso. Además, el reencuentro nos trae una realidad que se prefiere olvidar: ¿acaso tenemos presente qué fue de esas comunidades o cómo se han reconstruido? Por ello es interesante e importante el trabajo que supuso Volver a ver.
En palabras de la directora, la búsqueda de los personajes fotografiados fue compleja, pero se contó con el apoyo de las comunidades. Se trata de lugares de --aún-- difícil acceso. Pareciera que en treinta años pueden cambiar muchas cosas, y de hecho así ha sido: personas que nacen y mueren, la zona ya no está militarizada y el terrorismo no es más una amenaza para los ciudadanos que ahí viven. Pero otras no: en el olvido vivían entonces y en el olvido viven ahora. ¿Quién recuerda sus luchas?
Es justo decir que quienes los retrataron nunca dejaron de pensar en ellos. Vera Lentz, entonces fotógrafa freelance, Óscar Medrano, de la Revista Caretas y Alejandro Balaguer, volvieron a Ayacucho con el corazón abierto. “Fue difícil entrablar contacto con algunos de los protagonistas, pues son personas que han sufrido mucho”, dice la directora. Y así el documental de Judith Vélez no es solo el retrato del olvido, sino también una forma de reconciliación.
Por ello, dada la importancia del tema, y tras el éxito de otro documental peruano --La revolución y la tierra, que sigue en cartelera comercial-- sorprendió el accidentado paso que tuvo Volver a ver por la cartelera comercial limeña al momento de su estreno, hace dos semanas: solo le dieron tres horarios. Esta semana, acudiendo al circuito alternativo y al pedido de las distintas regiones del país, se proyectará en Lima y en Arequipa.
En Lima: El domingo 1 de diciembre a las 16:00 en El Galpón Transcinema. Av. Cipriano Dulanto 949 (ex La Mar) - Pueblo Libre.
En Arequipa: El sábado 30 de noviembre a las 18:30 y del domingo 1 al viernes 6 de diciembre a las 19:30 en el Teatro Umbral San Francisco 204 Interior 110. Arequipa.