Quien haya viajado al extranjero y no se haya visto tentado a traer todos los productos que vio en los aparadores, que tire la primera piedra. Sí, a todos nos pasa. Por más ahorradores que creamos que somos, si vemos ropa, productos tecnológicos, perfumes o cosas por el estilo, sentimos la necesidad de comprarlos, ya sea para nosotros o para un ser querido. Luego de desear comprarlos, pensamos en si entrarán en la maleta, pero casi nunca –por no decir nunca– imaginamos si esos productos nos traerán alguna complicación en Aduanas al aterrizar en nuestra ciudad. Para evitarlo, se pueden seguir los siguientes pasos.
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1. Verifique si el producto puede entrar sin problemas en el país.
Sí, está de vacaciones o tal vez con mucho trabajo en aquella ciudad a la que lo mandaron de la oficina y, lo que menos quiere es revisar la página web de Aduanas (www.sunat.gob.pe) para averiguar si aquello que piensa comprar es considerado una mercancía libre de arancel (tributo que se paga por importar un bien), restringida o prohibida. Es mejor darle un vistazo a la zona Orientación Aduanera/Información a Viajeros. Así se librará de pasar un mal rato al llegar a Lima con sus compras.
2. Cantidades permitidas.
Imaginemos que ninguno de los productos que trae paga arancel y tampoco están prohibidos o restringidos. Aun así, hay algo que debe saber: Aduanas pone un límite al ingreso de bienes personales traídos en la maleta. Por ejemplo, solo puede traer, además de ropa, dos celulares, dos cámaras fotográficas, una videocámara, un aparato de videojuego portátil, una laptop, dos discos duros externos para computadora, como máximo tres litros de licor y hasta un animal doméstico como mascota, entre otras cosas que pueda verificar en la página web reseñada en el paso 1.
3. ¿Y si se pasa de las cantidades permitidas?
Si se pasa las cantidades permitidas, el funcionario aduanero puede presumir –dependiendo del tipo de bien– que trae cosas para luego comercializarlas. De ser así, estaría evadiendo impuestos. Pero independientemente de ello, si el valor de los bienes traídos como equipaje sobrepasa los US$500, pero no llega a los US$1.000, debe pagar un tributo único de 12% del valor de los objetos.