Las cuatro Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP) que operan en el país han presentado su propuesta para una eventual reforma del sistema previsional peruano. El planteamiento busca, en líneas generales, la garantía de una pensión mínima a favor del afiliado, aumentar la competencia entre las administradoras de fondos e incentivos al aporte desde el Estado.
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“Hoy solo tres de cada diez personas que trabajan van a tener acceso a una pensión. Lo que buscamos con esta propuesta es que la discusión sobre las pensiones sea parte de las políticas públicas”, explicó Giovanna Prialé, presidenta de la Asociación de AFP.
En la siguiente nota repasamos las cinco propuestas que plantean las AFP:
1. Pensión garantizada
Considera una pensión mínima para todos los afiliados que cuenten con 20 años de aportes y escalonada para aquellos que cuenten con entre 10 y 20 años de contribución a su AFP. Dicha pensión, según se precisa, debería ser al menos equiparable a la que hoy tiene la ONP (S/583).
“En este nuevo sistema, todos los que aporten 10 años tengan una pensión proporcional y aquellos que lleguen a 20 años alcancen una pensión garantizada que sea equivalente al menos a la que hoy se entrega en el Sistema Nacional de Pensiones”, dijo Prialé.
Para garantizar ello, se plantea reemplazar progresivamente el programa Pensión 65 para la entrega de un capital semilla a cada persona al momento de su nacimiento. “Hoy el presupuesto de Pensión 65 es 0,12% del PBI peruano. Lo que planteamos nosotros es que usemos ese mismo presupuesto para el capital semilla a cada recién nacido. Producto de la capitalización individual, este irá creciendo en el tiempo”, aseveró.
La Asociación de AFP recalca que es en este punto en el que reside el pilar solidario de la propuesta, dado que “la pensión se financiará con los impuestos que pagan todos los peruanos”. Se estima, además, que el alcance sería mayor en 10 años al que tendría el programa de Pensión 65: “Resulta más eficiente, pues con Pensión 65 se tendría 580 mil beneficiarios en un lapso de 10 años y con capital semilla 5,8 millones de beneficiarios”, agregó Prialé.
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2. Aumentar el número de gestores
Se propone aumentar la competencia con nuevos gestores que, en igualdad de condiciones, administren los aportes de los afiliados. Ello implica, según se explicó, que dichas instituciones tengan su patrimonio separado al de los fondos previsionales y que preserven la intangibilidad de los aportes. Con ello, si bien se abre la puerta a nuevos jugadores privados en el mercado, también implicaría una transformación de la ONP.
“Las personas [en la ONP] no tienen una cuenta individual de capitalización. Y lo que al final reciban de pensión va a depender de cuántas personas estén aportando. El sistema de reparto como está no es sostenible en ninguna parte del mundo porque la estructura demográfica ha hecho que cada vez haya más personas que se jubilan y menos personas trabajando. Nosotros sí creemos que el sistema público de pensiones podría ir migrando hacia uno de capitalización individual”, sostiene Giovanna Prialé
3. Comisión por desempeño
Dos componentes integrarían la comisión que cobran las administradoras por la gestión de los aportes. Una primera parte sería fija para cubrir costos operativos y una segunda parte sería variable y de acuerdo a la rentabilidad obtenida en un periodo determinado. De no lograrse rentabilidad -precisa la Asociación AFP- no se cobraría el componente variable de la comisión.
4. Contribución equiparada
Para los contribuyentes informales e independientes, se plantea una contribución equiparada por el Estado. Siendo así, para mejorar el ahorro potencial del afiliado, el Estado aporta con un sol por cada sol aportado por el trabajador. Todo ello hasta llegar a un tope básico de S/65 por cada persona mensualmente.
5. Devolución del 1% del IGV
Finalmente, se plantea la devolución de 1% del IGV que paga anualmente cada afiliado. Con ello, se incentiva el ahorro de jubilación y se eleva la pensión.