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Hace solo un quinquenio, el mercado cementero peruano –que suma ventas por más de US$1.250 millones al año– lucía como un bocado apetitoso al alcance de transnacionales mexicanas, brasileras, españolas y hasta alguna chilena.
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Pero a contracorriente de lo que ha pasado en el mercado mundial del cemento –que tiende a la consolidación–, en el país hemos visto el fortalecimiento e incluso internacionalización de dos de las tres empresas peruanas que operan las siete plantas que abastecen la demanda local. En tanto, la tercera –Cementos Pacasmayo– ha reiterado que al no concretar ninguna compra este año, su prioridad a futuro es iniciar su internacionalización.
Así, en mayo de este año, Unacem –controlada por el Grupo Rizo Patrón– anunció el inicio de su expansión regional tras la compra de la planta cementera de Quito de la gigante francesa Lafarge por US$517 millones.
Con su planta en Ecuador, Unacem sumó su cuarta planta –ya poseía tres: dos ubicadas en el Perú (Lima y Junín) y una en Arizona (EE.UU.)– y el 22% del mercado cementero ecuatoriano.
A ello se suma la compra realizada en enero del 51% del accionariado de la empresa chilena Prefabricados Andinos, proyecto al que Unacem destinó US$7,1 millones.
Con esas adquisiciones, la empresa que abastece la mitad de la demanda cementera local también consolida su reciente título de “multilatina” peruana.
LA EXPANSIÓN EN EL SUR
En tanto, hace dos semanas el Grupo Gloria –a través del Holding Cementero del Perú– anunció que tras el pago de US$300 millones ya controlaba el 98,4% de Soboce, la mayor cementera boliviana.
La historia de la expansión del holding cementero controlado por la familia Rodríguez Rodríguez –cuya punta de lanza es Cemento Yura– comenzó en el 2012, con la compra del 47,02% de Soboce. Con esta inversión, la segunda mayor cementera del país suma el 45% de la demanda de cemento en Bolivia.
Tomar el control de Soboce ha sido el último paso de la interesante estrategia comercial que desplegó el grupo tras el anuncio, en el 2008, de la construcción de dos plantas cementeras –Cementos Otorongo y Cementos Interoceánicos– que apuntaban a disputarle el mercado del sur del país.
La táctica pasó por ‘copar’ el mercado del sur invirtiendo en dos ampliaciones seguidas de sus plantas de Arequipa y Puno. Con esto cerró el paso a cualquier inversión adicional en la zona.
EL NORTE ESPERA
La internacionalización de Cementos Pacasmayo es prioridad para el Grupo Hochschild por lo menos desde el 2013. El CEO de la cementera, Humberto Nadal, comentó a este Diario que si bien este año no se concretó, la adquisición de una operación en el exterior es “su obsesión” a futuro. Ello sería ahora más factible, ya que la empresa concluirá en julio del 2015 la construcción de su planta de Piura, en la que invierte US$385 millones. Con esta nueva fábrica Pacasmayo se consolidará como la segunda mayor cementera del país.
LAS CUENTAS EN AZUL
El mercado cementero local terminará el año con un resultado casi plano. En esa línea, los resultados financieros de los operadores no reflejan la bonanza de años anteriores. Así, las ganancias netas de Unacem (S/.151,7 mlls.) disminuyeron 1,9% al cierre del tercer trimestre. En el período analizado, sus despachos crecieron 0,7%.
Mejor escenario logró Cementos Pacasmayo, cuya utilidad neta avanzó 2,02% en los nueve primeros meses del año (S/.112,6 mlls.). Según su CEO, Humberto Nadal, el resultado es producto de la aplicación de una serie de medidas para mejorar las eficiencias de la empresa. Así, el margen bruto de la empresa será mayor este año, pese a que hasta el tercer trimestre las ventas retrocedieron 0,8%.
En tanto, Cementos Yura logró en el tercer trimestre una utilidad neta de S/.67,25 mlls., cifra superior en 16,9% a lo registrado en el 2013.
EN PUNTOS
► Cambio de manos. Dos de las plantas de la gigante Lafarge en la región han pasado a manos de grupos peruanos. La compra de Unacem de este año se sumó a la adquisición de Cementos Melón de Chile por parte del Grupo Breca (2009).
► Inversión local. El Grupo Gloria también ha invertido este año S/.182 millones en su operación cementera local.
► Producción. El consumo local de cemento llegó a los 10,5 millones de toneladas en el 2013.
