Los precios del oro subían el viernes por cuarta sesión seguida, impulsados por la búsqueda de refugio tras datos de Estados Unidos que ahondaron las dudas sobre el crecimiento económico, con el mercado pendiente de un reporte de empleo que podría apuntar a nuevos recortes de tasas de la Reserva Federal.
A las 0947 GMT, el oro al contado ganaba un 0,28% a US$1.509,02 la onza tras llegar el jueves a US$1.518,50, su máximo nivel desde el 25 de septiembre. Los futuros del oro en Estados Unidos cotizaban estables en US$1.514,60 por onza.
Según Daniel Hynes, analista de ANZ, los decepcionantes indicadores económicos de Estados Unidos en los últimos días respaldaban las compras de refugio.
La actividad del sector de servicios de Estados Unidos se frenó a un mínimo de tres años en septiembre, mostró un sondeo el jueves, luego de una sucesión de datos económicos deficientes esta semana. El mercado espera a las 1230 GMT las nóminas no agrícolas del país.
“Si vemos también datos de nóminas no agrícolas más débiles de lo esperado, eso respaldará los precios del oro y el impulso será bastante fuerte, siempre que esté respaldado por una postura moderada de la Fed”, agregó Hynes.
Dos miembros de la Fed dijeron el jueves que están dispuestos a ofrecer otro recorte de tasas, mientras que el vicepresidente Richard Clarida sostuvo que el banco central “actuará según corresponda para mantener una tasa de desempleo baja y un crecimiento sólido y una inflación estable”.
El platino cedía un 0,91% a US$882,14 la onza, con un declive de más de 4% esta semana. En tanto, la plata ganaba un 0,11% a US$17,57 por onza y el paladio sumaba un 0,27% a US$1.657,97 la onza, encaminándose a una caída de 1,5% en la semana tras ocho ganancias semanales.