Los precios del cobre bajaban este jueves, ante la reducción de la preocupación sobre el suministro en Sudamérica y un rebrote de la débil demanda estacional en China, el mayor consumidor mundial.
A las 1150 GMT, el cobre a tres meses en la Bolsa de Metales de Londres (LME) perdía un 0,8% a US$6.379 la tonelada.
Las interrupciones de suministro por el COVID-19 en el mayor productor mundial, Chile, e inundaciones en China ayudaron a impulsar al cobre a un máximo de dos años en julio, pero las minas del país sudamericano estaban volviendo a elevar su producción y el vecino Perú también se estaba reactivando tras sus cierres.
“El descenso de las preocupaciones en Chile y Perú y los efectos que ya se están sintiendo por el impulso fiscal de China hacen que el sentimiento por el cobre se debilite más”, dijo Tim Wood-Dow, analista de BMO Capital Markets.
Los precios se veían presionados también por la tensión entre Estados Unidos y China, antes de un fin de semana crucial entre funcionarios comerciales de ambos países.
La minera estatal chilena Codelco espera un rápido progreso en el aumento de la capacidad de procesamiento en su proyecto subterráneo Chuquicamata.