La necesidad de préstamos, el interés por el ahorro y la periodicidad con la que perciben ingresos los peruanos no bancarizados ofrece hoy una ventana de oportunidades para nuevos productos financieros.
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Según el Estudio Nacional del Consumidor Peruano 2022 elaborado por Arellano Consultoría para Crecer, realizado entre abril y junio del 2022 a 5.300 personas en las áreas urbanas del Perú, de entre 18 a 65 años de edad y de todos los niveles socioeconómicos, el 38% del total de encuestados ha solicitado alguna vez un préstamo de dinero a algún familiar, persona o institución.
Dado que dicho porcentaje en el 2019 alcanzaba el 35%, puede concluirse que existe un crecimiento en la demanda por préstamos. Solo entre los no bancarizados, dicho total llegó al 29%. No obstante, resalta que un 65% solicitó dinero a un familiar, un 4% acudió a una Caja Municipal y un 5% a una financiera.
Jorge Rubiños, gerente comercial de Arellano Consultoría para Crecer, explica que existen variables que resultan determinantes para entender esta preferencia por préstamos entre miembros de la familia.
“El no bancarizado tiene un nivel de instrucción menor al bancarizado. Esta es una variable importante. La encuesta muestra que el 49% de estos no bancarizados declaró no haber solicitado un préstamo a una entidad financiera porque ello implica mucho papeleo. Esto refleja una percepción, pues no tienen la información de las facilidades que hoy existen”
Jorge Rubiños, gerente comercial de Arellano Consultoría
¿Quiénes son estos peruanos no bancarizados? En su mayoría –un 41%–, trabajadores independientes. El segundo grupo más importante son hombres y mujeres que se dedican al hogar (27%) y, en tercer lugar, estudiantes (14%).
El ahorro, otro producto
En paralelo, existe un interés por el ahorro. Se le consultó a los no bancarizados qué harían si es que su ingreso personal se incrementara en un 25%. El 40% se mostró a favor de ahorrarlo y un 24% indicó que utlizaría el dinero para la compra de alimentos y bebidas.
“El hábito del ahorro es algo que se ha venido incrementando año tras año. Lo cierto es que ya no hay la misma posibilidad de ahorrar. Un 74% mencionó que hoy ahorra menos que antes. El ahorro promedio mensual para el total de los encuestados fue de S/240″, afirma Rubiños e indica que en el 2019, el ahorro promedio estimado en el país era de S/321.
Atentiendo al segmento
Lo cierto es que algunas entidades y servicios financieros ya se encuentran abocados a este segmento. Yape, por ejemplo, brinda microcréditos desde setiembre del 2022.
Christian Saavedra, líder de Yape Créditos, cuenta a Día1 que al cierre del año pasado se realizaron más de 100.000 desembolsos con microcréditos de entre S/150 y S/200, que son los montos para este servicio.
“Con ello, hemos cerrado el año con más de S/25 millones en desembolsos. Para el 2023, queremos superar el ritmo que hemos tenido en nuestros primeros cuatro meses de operación”, comenta.
Christian Saavedra, líder de Yape Créditos, explica que dada la alta recurrencia, se está evaluando ampliar el tope de los microcréditos.
“Creemos que en un futuro incluso se pueden ver desembolsos de S/5.000 o S/10.000 a través de la aplicación, pero todavía no estamos en ese escenario”, explica.
Por otro lado, centrándose concretamente en el público estudiantil, la fintech peruana Baldecash ofrece dos productos de crédito: préstamo inmediato y arrendamiento operativo de laptops de hasta 24 meses. Con ambos servicios han logrado llegar a 3.000 estudiantes de Lima y provincias.
Rubén Montenegro, fundador y CEO de Baldecash, comenta que las fintech o algunas otras ramas de la banca tradicional son las que están hoy buscando brindar una solución de préstamo a los no bancarizados.
“En Baldecash nos enfocamos en estudiantes de educación superior que estudian y trabajan, principalmente. Para nosotros, ese es un segmento interesante porque tienen varios atributos que permiten aplicar una evaluación alternativa sobre el nivel de riesgo”, comenta.
Montenegro agrega que a nivel general, un factor importante entre los no bancarizados es su capacidad de generar ingresos.
“Una parte importante del segmento no bancarizado con necesidad de financiamiento sí tiene la capacidad de afrontar cuotas moderadas”, asevera.
Según la encuesta de Arellano Consultoría, el 39% del total de los no bancarizados percibe sus ingresos mensualmente. El segundo grupo (24%) está compuesto por personas que perciben sus ingresos diariamente, y un 17% son los que no tienen una frecuencia definida. Este último grupo, en el 2019, era de 18%.