“En el BBVA buscamos poner las oportunidades de esta nueva era al alcance de todos”

La historia de desafíos y éxitos que relata el libro llega en una coyuntura difícil a nivel nacional. ¿Hay algo de dicha realidad que lo haya motivado a publicarlo?

Vivimos situaciones difíciles en el mundo y en nuestro país. Tengo casi cuatro años en el Perú y ha sido una experiencia estupenda. Encontré que era un buen momento para contar [mis experiencias] porque uno necesita aprender y escuchar la experiencia de otras personas. Creo que la sociedad necesita información positiva y veraz de un tercero y lo que ha hecho en torno a su vida.

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Los capítulos narran historias que se desarrollan en México, pero la mayoría son cercanas a la realidad de todo latinoamericano. ¿Coincide con ello?

Estoy convencido de que todas las sociedades nos parecemos mucho. Perú y México, viniendo de culturas milenarias, ya tienen cimientos compartidos. En cuatro años en Perú he visto una pandemia que nos afectó mucho, conflictividad social y el ciclón Yaku. Con todo ello, yo admiro sinceramente a los peruanos. Hay espíritu emprendedor y capacidad de salir adelante. El Perú tiene herramientas importantes para mejorar su producción y debemos aprovecharlas. Para ello, se necesita un periodo de tranquilidad política que nos ayude, en los siguientes años, a ordenarnos.

Usted profundiza en la idea de que cada uno es el arquitecto de su propio destino. Sin embargo, existen factores de cada país que para algunos casos influye en el trayecto. Informalidad, brechas sociales, entre otros. ¿Cómo logra contextualizarse ello en el libro?

Los obstáculos siempre están. El libro muestra fracasos, desilusiones, la presión de salir adelante en una familia numerosa. Cada uno es arquitecto de su destino, lo que implica definir cómo quieres enfrentar el problema. El libro se llama ‘Uno en un millón’ porque mi padre siempre nos decía ello. Su intención era hacernos pensar diariamente que éramos los mejores. Por eso es por lo que todos somos ese “Uno en un millón”.

Se enumeran principios que guían la actitud del banco y y la de sus trabajadores de cara a sus clientes. ¿Qué tan difícil es mantener dicha visión en un sector tan competitivo como el financiero?

En BBVA nos mueve nuestro propósito y nuestro compromiso. No solo buscamos tener buenos recursos, sino tener un impacto positivo en nuestros clientes. El propósito del BBVA es claro: poner las oportunidades de esta nueva era al alcance de todos. Los valores son la brújula para avanzar en ello.

¿Hacia dónde va hoy el BBVA Perú? ¿Cuáles son los objetivos de largo plazo?

La sostenibilidad es uno de los grandes cambios. La sostenibilidad, desde el punto de vista ambiental y social, es una de las grandes líneas de nuestro banco. Además, el tema de la educación financiera de nuestros clientes también es crítico. Esto, para tener más peruanos en el sistema financiero, para ayudar a tener una economía más formal.

La digitalización también es parte de ello.

Nosotros ya estamos sobre ello. El BBVA se ha convertido en el primer banco adquiriente del Perú con Openpay. Además, hemos tenido el lanzamiento de las tarjetas Smart hechas de material reciclado y el reconocimiento facial en el aplicativo. Son señales del apetito del BBVA por la innovación, la digitalización y la sostenibilidad.