“No hay tiempo de festejar, el lunes tenemos otro desafió”. Ricardo, acaba, una vez más de contradecir a los incrédulos, y ya está pensando en el premio mayor. Maslow, el humanista que elaboró la pirámide de necesidades, hubiese citado al técnico de la selección para explicar qué es lo que motiva a los seres humanos a buscar la trascendencia. El hincha, más cercano a lo que le pide el cuerpo, no hubiese hablado de autorrealización como Maslow, sino de hambre, de ganas de seguir haciendo bien las cosas. Como un conjuro contra el conformismo, las palabras de Ricardo Gareca han vuelto a sembrar la calma. Paraguay es un río que ya pasó, Brasil es el mar que se avecina.
LEER MÁS AQUÍ: Ricardo Gareca y la recuperación del manual de buenas costumbres con la selección peruana | CRÓNICA
Los números de Tite con el Scratch asfixian las esperanzas de victoria de sus rivales. Desde que llegó el 2016 ha dirigido a Brasil en 60 juegos. Ha perdido apenas cuatro y solo uno de esos partidos ha sido en disputas oficiales: la dolorosa caída contra Bélgica en el Mundial de Rusia. Las otras tres derrotas, en amistosos, fueron dos contra la Argentina de Messi y una contra Perú, el día del cabezazo de Abram cuando moría el partido en Los Ángeles. Nunca bajo su tutela, Brasil fue superado por más de un gol de diferencia. Su efectividad asciende a un ochenta por ciento. Ganó 44 partidos, empató 11 y conquistó la Copa América del 2019. Con Tite, el gigante sabe hacerle honor a su estatura.
De ese encuentro feliz de hace dos años en el Memorial Coliseum permanecen algunos jugadores en ambos planteles. En Perú fueron titulares ese día: Gallese, Trauco, Tapia, Yotún y Abram. Luego ingresaron Santamaría, Cueva y Carrillo. En Brasil arrancaron: Ederson, Militao, Marquinhos. Alex Sandro, Casemiro, Richarlison y Firmino, después entraron Neymar, Paqueta y Vinicius Junior para tratar de encauzar un partido que les habían birlado con artes nobles. Esa noche con un Yotún sublime y un Aquino omnipresente, Perú lo ganó con justicia. Durmió la pelota, controló, no exento de alguna zozobra y cuando tenía que pegar, sobre el final, asestó el golpe de nocaut.
Por relevancia y actualidad sería absurdo comparar ese juego con la semifinal de mañana, lo que de otro lado no impide recordar la magnífica disposición táctica de aquella noche. Brasil es un equipo con tanto talento y oficio que, aun con uno menos y teniendo menor posesión de balón, como frente a Chile, se las arregla para ser superior en la red.
Los registros técnicos de los brasileros les dan la suficiencia de los que se saben buenos. Las estadísticas respaldan su eficacia contra los peruanos. Con Gareca al mando, desde el 2015, Perú solo ha podido derrotar a Brasil en esa ocasión, las otras nueve fueron victorias de la Verdeamarela y en ocho de esos triunfos la diferencia fue por lo menos de dos goles. Si Perú repite los yerros defensivos que tuvo contra Paraguay se expone a que le pesen los párpados.
Para sorprender al favorito en su casa y asombrar al mundo se necesita una cuota de sacrificio y solidaridad formidables. La ausencia de Carrillo debe ser suplida con sincronizados movimientos en bloque. Solo con una actuación colectiva fantástica, sostenida por rendimientos individuales sobresalientes Perú va a competirle a Brasil. A este nivel, si se es intermitente en el esfuerzo y no se es eficaz cuando se puede, se impone una realidad feroz, esa que te abruma y te recuerda que son pentacampeones del mundo. Lo bueno es que la selección lo sabe. Ser la excepción a la regla es la consigna. Como en el 75.
“Ojalá la gente esté contenta en el Perú. Nosotros no tenemos tiempo de festejar”, dijo Ricardo tras vencer a Paraguay. El torneo les ha venido bien, pero sabe de la envergadura del juego de mañana y quiere más. Como siempre.
Las montañas, a veces, aunque no lo parezcan, también pueden moverse.
MÁS SOBRE COPA AMÉRICA EN DT...
- Tras el partido de Perú: prensa argentina señala el mal estado del campo donde enfrentarán a Ecuador
- Gianluca Lapadula: el 9 que vino de Italia y define a Paolo como “un histórico” en la selección
- “¡Vení si sos hombre!”: Gómez esperó en el túnel al árbitro del Perú vs. Paraguay luego de ver la roja [VIDEO]
- “Podemos jugar bien en cualquier circunstancia”: Neymar destaca la respuesta de Brasil
- Desde otro ángulo: así se vivió la clasificación por penales de la selección a ras de cancha | VIDEO
VIDEO RELACIONADO
Contenido sugerido
Contenido GEC