Paolo Guerrero cerca del regreso a las canchas: ¿Cuáles son los factores más importantes para completar su recuperación?

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La escena que encuentra cerca al área venezolana es para lamentar. Paolo se queja, y el médico de Perú revisa la zona afectada. No puede adelantarse a dar un diagnóstico y le pide al delantero que intente seguir. Guerrero no puede. Grados mira al técnico Chemo del Solar y el gesto de cambio es inminente. Ingresa Rengifo como reemplazo. La blanquirroja, en su peor proceso clasificatorio de todos contra todos, cae por 3-1. Al día siguiente se confirma la lesión: rotura del ligamento cruzado posterior completo, rotura parcial del ligamento cruzado anterior, y una rotura meniscal en la rodilla izquierda.

Paolo Guerrero recibirá, entonces, su cumpleaños 26 en pleno proceso de rehabilitación de una lesión que en el pasado obligaba a los futbolistas a colgar los chimpunes. El peruano, en cambio, sufre, pero se recupera a tiempo. En marzo del 2010, vuelve a las canchas con la camiseta de Hamburgo. Pasan en total 194 días entre las dos fechas. Y pasa un año más para volverlo a ver jugando en la selección peruana.

Eran años en los que se coleccionaban calendarios y álbumes Panini de cada Mundial sin Perú. Luego, todos lo vieron regresar. Padecer camino a Brasil 2014, y después ser protagonista al devolver la bandera nacional a una cita mundialista. Lo vieron, también, pelear en el TAS para jugar en Rusia 2018 y luego cumplir con una dura sanción tras dar positivo en un doping. Volver, nuevamente, y jugar la final de una Copa América. Y cuando mejor le iba en un 2020 atípico por la pandemia, otra lesión se interpuso en su camino: rotura del ligamento cruzado de la rodilla derecha.

A pesar de las dos piernas lastimadas, el goleador sigue avanzando.

Más de 150 días después, la pregunta se ha ido haciendo cada vez más necesaria: ¿Hay vida en la selección peruana sin Paolo Guerrero? Las respuestas se pueden resumir en la frívola cifra de cuatro partidos y apenas un punto sumado en las Eliminatorias Qatar 2022. Y mientras las discusiones se centraron en Gianluca Lapadula o Raúl Ruidíaz, la presencia del goleador histórico se hizo extrañar aún más. En esta etapa final de su recuperación, otra pregunta nos asalta: ¿Volverá en los plazos propuestos?

Dos especialistas fueron consultados por El Comercio para explicar cómo se lleva una lesión tan grave como lo es la rotura del ligamento cruzado de la rodilla.

Por buen camino

Paolo Guerrero apareció en los entrenamientos de Internacional el pasado miércoles 20 de enero. Es su vuelta oficial a unas canchas. Antes se había dejado ver por las instalaciones de la Videna de San Luis en Lima, pero no se conoció con precisión qué trabajos realizó bajo el seguimiento del comando técnico de Ricardo Gareca.

El Dr. Julio Grados, con más de dos décadas de experiencia como cabeza del departamento médico en clubes peruanos y selecciones nacionales, recuerda así el tratamiento que pudo aplicarse Guerrero en la grave lesión que sufrió hace más de una década. “De aquella vez (2009), estoy casi seguro que no se hizo reconstrucción. Quizás se hizo algo alternativo”, nos responde el deportólogo y especialista en Ortopedia y Traumatología.

“Cuando te hacen reconstrucción de ligamento cruzado (Paolo se la realizó en agosto pasado), en seis meses estás apto para jugar. Hay que llevar, además, una buen terapia, buenos fortalecimientos. Hay que tener protocolos y experiencias para hacerlo”, dice sobre el actual método que lleva Guerrero en su recuperación, el cual fue anunciado tras la operación por el club Internacional de Porto Alegre.

Sobre si la edad de Paolo influye en los plazos que toma recuperarse de una lesión de tal gravedad, Grados acota que no es totalmente decisivo. “Operar a un paciente de 45 años hacia adelante es complicado. Si tienes 20, 30 o 35 es mucho mejor. A cuanto mayor es la edad, es un factor más, pero no es determinante. Hay pacientes de 40 años que se operan y llevan muy bien los procesos de rehabilitación y vuelven a jugar”, señaló.

Paolo Guerrero cumplió 36 años a inicios del 2021. En lo queda del del camino en las Eliminatorias cumplirá 37 y de lograr el objetivo de alcanzar el boleto a Qatar 2022 será el atacante peruano con mayor edad en una cita mundialista. “Hay que manejar bien las cargas de trabajo de la rehabilitación. De soportar el dolor, de trabajar fuerza muscular. Ya lo ha hecho muy bien. Yo lo he visto entrenando en su club. Se ve que está en los plazos correspondientes”, comenta Grados.

Como uno de los doctores que ha trabajado de cerca con Guerrero desde que jugaba en la selección Sub 17 dirigida por César ‘Chalaca’ Gonzales, el Dr. Grados se atreve a dar buenas buenas noticias para lo que veremos pronto en la vuelta de Paolo a las canchas. “Conociéndolo, por supuesto, él es muy consciente, lleva muy bien los plazos de rehabilitación y tiene un equipo en Brasil muy bueno. Paolo es un chico fuerte, delgado y disciplinado en este aspecto”, confía el deportólogo nacional.

Con la cabeza en su lugar

Desde el 16 de agosto pasado cuando se lesionó enfrentando a Fluminense, Paolo Guerrero ha tenido que seguir desde casa un total de 38 partidos de Internacional. En este transcurso, el ‘Colorado’ cambió de técnico por la salida de Eduardo Coudet, fue eliminado de la Copa Libertadores a manos de Boca Juniors, y de la Copa de Brasil tras perder por penales contra América Mineiro, de la Segunda División. Sin embargo, se recuperó de una mala racha, y con Abel Braga en el banco, ha conseguido subir al liderato del Brasileirao.

Paolo ha sido oportuno para aparecer en redes sociales. Su última foto en Instagram lo muestra en “Un lugar especial”. La imagen tiene al delantero con el fondo de una cascada natural. Todo parece en orden en la cabeza del goleador, sin embargo, es necesario tener la opinión de un especialista para saber cómo se afronta una lesión de la magnitud de una rotura de ligamentos.

Julio Peche trabajó en Sporting Cristal y tiene un amplio conocimiento del tema. El psicólogo deportivo, ante el Comercio, expuso su idea central sobre lo que vive un futbolista lesionado. “Existe un reconocimiento de lo que es el esquema corporal, es decir, lo que uno ve, lo que uno puede tocar. Pero existe la reproducción del esquema corporal en la estructura o aparato psíquico del deportista, que viene a ser la reproducción imaginaria del cuerpo de la persona en el psiquismo. Si existe una lesión en el soma, inmediatamente se produce una lesión en la imagen representativa que se tiene en el aparato psíquico”, explica.

“Si uno se lesiona el ligamento de la pierna derecha, en el aparato psíquico también se produce la lesión. ¿Cómo se puede explicar o verbalizar esto? En el punto de vista psicológico. Las personas se rehabilitan de la parte del soma, pero no se rehabilitan de lo que significa la representación del esquema corporal de la rodilla del deportista en el psiquis humano. ¿Esto qué significa? Que la lesión persiste en la cabeza, en el psiquismo. Por lo tanto, hay dolores imaginarios, desconfianza, inseguridades, porque no se han reproducido al igual que la recuperación del soma rodilla con el soma imaginativo que se encuentra en el aparato psíquico. Esa es mi teoría”, afirma.

Todos los clubes importantes en el mundo cuenta con un departamento psicológico, el cual no solo ayuda a los futbolistas en temas personales, sino que acompaña y ayudar a resolver los estragos que puede dejar una cruda lesión. “Toda persona que está en un proceso de rehabilitación de fisioterapia, a la par debe tener un trabajo de reparación del aparato psíquico donde está representado su esquema corporal. Muchos jugadores, de repente, no lo necesitan, pero algunos jugadores si lo necesitan porque aparece el temor al realizar una actividad física”, sostiene Peche.

Sobre el factor edad -Paolo tiene 36 años- también hubo respuestas de parte del especialista. “Uno puede decir que al nivel de soma, por la edad, puede haber una cierta merma en su recuperación. Pero muchas veces la recuperación viene como una disposición psicológica, y la recuperación a la par de estar haciendo sus actividades de rehabilitación y conversando con personas adecuadas o pertinentes de lo que es el campo de la psicología, pues la recuperación se logra mucho más rápida”, dice.

El desempeño del psicólogo deportivo es clave en el proceso de recuperación de un futbolista. Por tratarse de una segunda vez, ya que Paolo tiene experiencia en este tipo de lesiones, pudo haberse rodeado de los mejores especialistas tanto en Internacional como en su paso semanas atrás en la selección peruana. “La conversación permite la liberación de energías tensionales, de imágenes que aparecen en el aparato psíquico acerca de la lesión. Entonces, conversando se va diluyendo estructura pensantes negativas que pueda tener la persona lesionada. Por ello, muchas veces hay que darnos cuenta que los jugadores lesionados se les ve que están caminando junto al fisioterapeuta o al psicólogo deportivo (dentro de la cancha de entrenamiento). No es un trabajo de consultorio, es un trabajo de campo”, apuntó.

Guerrero tiene enfrente otra prueba en su vida, otro escalón para seguir subiendo en su carrera. En el último tramo de su rehabilitación, la constancia y paciencia deben acompañarlo. Las Eliminatorias en marzo con la selección peruana le siguen guardando el sitio de capitán y goleador que todo el país quiere y necesita volver a ver en acción.

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