Para muchas personas una cicatriz se transforma en algo traumático y buscan mil y un maneras ocultarlo, pero para el beisbolista Joba Chamberlain no es problema.
El estadounidense, de los Tigres de Detroit, tiene una cicatriz en el codo derecho y no encontró mejor forma de 'camuflarlo' que convirtiéndolo en un tatuaje. Al tener la forma de una boca sonriente, le agregó dos ojos y hoy luce la curiosa imagen.
Chambearlain se operó el codo en el 2011 para reconstruir uno de los ligamentos y quedó con esa cicatriz, que ahora es una cara sonriente.
"No hay nada como poner una sonrisa en tu codo para comenzar a un viernes por la mañana! Que tengan un buen día a todos!", escribió en su cuenta de Twitter el deportista.
Nothing like putting a smile on ur "elbow" to start ur Friday morning! Have a great day everyone! pic.twitter.com/OyJx6FUQ1K
— Joba Chamberlain (@Joba_44) febrero 28, 2014
Joba logró el campeonato de la Serie Mundial de Estados Unidos en el 2009, cuando jugaba por los New York Yankees.
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