No hay peor desazón en el fútbol que perder habiendo hecho todos los méritos para ganar. Ahora, a esta decepción hay que sumarle que te anulan dos goles desde el VAR. Universitario tuvo condiciones para llevarse los tres puntos, pero a poco del final se dejó sorprender por un golazo de Apodi que cambió todo el panorama: perdió el liderato del Grupo G de la Copa Sudamericana y, ahora, ya no depende de sí mismo para avanzar de forma directa a la siguiente ronda.
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¿La ‘U’ es un equipo cada vez más sólido? Sí. Y se nota. Ir a La Plata y ganar, ir a Brasil y pelear no es un cuento. Es la estirpe uruguaya que le ha impregnado Jorge Fossati desde el banco. A los cremas se les nota una actitud ganadora. Sin embargo, su carencia estuvo ayer en ser contundente en ataque. Dos tantos en ‘offside’ pueden dar señales de que la ‘U’ supo pisar con autoridad el área contraria.
La caída ante Goiás, que tomó la punta del Grupo G con 8 puntos, trajo mayores obligaciones. La ‘U’ deberá ganar a Santa Fe en Colombia y hacer respetar su localía contra Gimnasia y Esgrima La Plata para intentar retomar el liderato de su llave. Asimismo, los cremas esperarán que Goiás no sume puntaje perfecto cuando reciban al ‘Lobo’ platense y visiten Bogotá para chocar ante ‘Los Cardenales’.
Línea por línea, así vimos al once que envío Jorge Fossati al estadio de Haile Pinheiro en Goiania.
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El arco y el golazo que no pudo evitar
Se abre el debate. ¿Estaba bien ubicado Carvallo al momento del golazo de Apodi? José Aurelio estaba donde debía estar, y pagó cara la osadía. Buscando siempre ser el auxilio en los balones largos detrás de sus defensores, el arquero de la ‘U’ tenía unos pasos adelante cuando Apodi sacó un bombazo que nadie pudo despejar. Este mismo año, en un contragolpe, Matías Succar había aprovechado que Carvallo estaba salido para sentenciar la victoria 2-0 de Mannucci en Trujillo.
Una defensa compenetrada que no pasa apuros
Es la línea que sale de memoria: Riveros como líbero, y Corzo y Di Benedetto de stoppers. Goiás demuestra ser el menos brasileño de los brasileños en las actuales competencias internacionales. Con Philipe y Alesson en ataque no llevó mayores peligros al área crema. En los duelos requeridos, Corzo ganó 3 de 5 con la cabeza y 3 de 7 con los pies. Riveros estuvo más seguro vía aérea saliendo airoso en 3 de 4 oportunidades, y 1 vez en cuatro choques por tierra. En cambio, Di Benedetto se llevó la mejor puntuación de la defensa, según Sofascore con 7.2, tras vencer en 5 de 6 jugadas por arriba y 8 de 11 por abajo.
Carrileros bien calificados, pero sin profundidad
Aunque las redes ardieron por sus malas decisiones en los metros finales, Sofascore calificó con 7.3 a Nelson Cabanillas, el mejor de la ‘U’ contra Goiás. El carrilero zurdo completó 26 de 31 pases (84%), mientras que en el otro lado, Andy Polo solo pudo acertar en 19 de 27 pases (70%). Además, ‘Caba’ completó los tres dribles que intentó en el cotejo, y pudo ganar en 9 de 12 duelos por tierra. Polo, en cambio, apenas pudo tirar un centro que no conectó Herrera.
Ureña y el triángulo del equilibrio
El chileño Ureña goza de un gran ritmo que le permite lanzarse en el momento correcto en cada barrida. Ayer no cometió ninguna falta, según Sofascore, pero cortó con 4 barridas los ataques de Goiás. Además, interceptó dos balones que le dieron salida a la ‘U’ con Martín Pérez Guedes a su derecha y Horacio Calcaterra hacia su izquierda.
Pérez Guedes supo pisar el área para meter un cabezazo que, si el VAR no hubiese sido tan perfecto, habría puesto el 1-0 para la ‘U’. Sobre Horacio Calcaterra hay que decir que si bien le quitó el puesto a Quispe, es porque el talento crema no pasa por un buen momento.
Dos tanques sin pólvora
Valera suma 10 goles y Herrera sus propios 7, pero en Goiania ninguno pudo poner adelante a la ‘U’ en el marcador. Jugaron 59 minutos juntos y no hubo sincronía como en el 4-0 a César Vallejo el pasado viernes. Tampoco los vimos generar apurar a la defensa brasileña. Valera jugó entre los centrales Sidimar y Edu, y Herrera trató de desequilibrar Bruno Melo y Hugo. Nada les funcionó. En Bogotá y Lima la puntería deberá afinarse si se quiere clasificar a la siguiente fase de la Copa Sudamericana.