Antes de que cumpliera 20 años, Reimond Manco ya era señalado como un prematuro ‘ex futbolista’ debido a sus indisciplinas que lo dejaron un par de veces sin club. Es más, en el 2011, después de aquel incidente del confuso ‘secuestro’ en México, su padre reconoció: “Mi hijo quiere dejar el fútbol”.
Ayer, una vez más apareció el jugador pidiendo perdón al borde del llanto. Por eso ese video, que ya vimos hace unos años y que probablemente veremos en un tiempo más, ya cansó. Por eso es que en este momento resulta muy fácil ‘pegarle’ a Manco. Este es el instante en que Manco indigna a muchos por haber tenido todo para ser un crack, y no lo quiso… o quiso pero no supo cómo.
El exceso de alcohol fue uno de los motivos que le impidieron llegar a la cima. La bebida fue su peor compañera en los episodios de escándalo que protagonizó en Lima, Cancún, Chiclayo, Huánuco y Cajamarca. Reimond Manco está enfermo y necesita ayuda. Y se lo dije el 2012 luego de retomar un contacto que él había cortado abruptamente el 2008.
En tiempos en que le llovían elogios, yo le decía lo que no quería escuchar, y su reacción fue negativa. Quizás haya sido igual con su madre a la que siempre pide perdón. Hoy tiene 24 años y lo mejor de él quedó congelado en sus actuaciones del 2007. El resto fue el remedo de una estrella que nunca brilló como profesional, si alguna vez lo fue, por el alcohol que escogió como el mal compañero que llena el vacío que quiere llenar.
Hoy no me importa si Manco se levantará para ser un crack, difícil pensar que lo será. Hoy solo le pido a su entorno, al más cercano, al que no se aprovecha de él, que lo convenza para que lo trate seriamente un especialista. ¿Se acuerdan que Kukín Flores casi se mata tras caer borracho de un quinto piso? Este es el momento en que podríamos estar evitando una tragedia.