Santos elevó su voz de protesta este miércoles tras el duelo de ida de su primer equipo contra Boca Juniors por las semifinales de la Copa Libertadores. El ‘Peixe’ empató sin goles en La Bombonera, un resultado que deja abierta la eliminatoria de cara a la revancha, pero dos incidentes provocaron molestia en el club brasileño.
Después del choque, el plantel del conjunto paulista sufrió un ataque mientras arribaba a su lugar de concentración en Buenos Aires, hecho que fue condenado de inmediato por su directiva.
“El autobús de Santos fue apedreado cuando llegó al hotel donde se hospeda. La piedra terminó rompiendo el cristal y pudo haber causado alguna lesión grave a la delegación santista”, publicó la entidad a través de sus cuentas oficiales en redes sociales, junto a una fotografía del daño provocado.
Esto representó “una actitud lamentable que va en contra de la envergadura del duelo entre dos de los mejores equipos del continente”, agregó Santos.
Minutos antes, la institución alba también manifestó que “enviará una carta a la Conmebol para expresar su descontento con la actuación del VAR en el partido”, especialmente por lo que considera un penal no sancionado.
“Santos destaca la extrañeza por la no verificación del VAR en el borde del campo, en la jugada que Marinho fue derribado en el área rival en el segundo tiempo”, indicó el club, reclamando un contacto de Carlos Izquierdoz contra su atacante, en una jugada que pudo cambiar el trámite del encuentro.