En el mundo del tenis existe un debate que aún no tiene cese. ¿Quién será el joven que logrará destronar al ‘Big 3’? Se cotejan los nombres de Daniil Medvédev (23 años), Alexander Zverev (22) o Stéfanos Tsitsipas (21), pero hasta el momento solo han podido rozar el trono de los tres reyes. Ahora la esperanza de la ‘Next Gen’ vuelve a caer en las manos de un fiable Dominic Thiem, aunque ya de 26 abriles. El austríaco querrá ponerle fin a esta persistente discusión cuando se enfrente a Novak Djokovic en la final del Open de Australia.
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El duelo número once entre ambos se disputará este domingo a las 3:30 a.m. (hora peruana/ en vivo por ESPN), donde habrá mucho en juego en el Rod Laver Arena. En el escenario predilecto de Djokovic, podría coronarse el serbio por octava vez en este Grand Slam. Si cumple la hazaña, ‘Nole’ recuperará el número 1 del mundo del ATP luego de casi cuatro meses.
El serbio tendrá enfrente el talento de Dominic Thiem, que ha encontrado su mejor versión sobre la pista dura. Será la tercera final en un Grand Slam del austríaco, quien esta vez desea quedarse con la gloria para borrar las derrotas en el Roland Garros del 2018 y 2019, cuando perdió contra Rafael Nadal. Una oportunidad más para ‘Domi’ que no querrá desaprovechar cuando pise este domingo la azulada superficie de Melbourne.
Djokovic y Thiem ya se han visto la cara en 10 oportunidades, con un saldo positivo para el serbio. ‘Nole’ ganó seis de esos encuentros, mientras que ‘Domi’ triunfó en las otras cuatro. Sin embargo, en los últimos cinco partidos se refleja una superioridad del austríaco tras haber saboreado la victoria cuatro veces.
Por ello, Djokovic tiene muy en cuenta el progreso de su rival. Sabe que no se puede fiar en ningún momento del verdugo de Nadal en cuartos. “No creo que Thiem sea realmente de la ‘Next Gen’. Ha estado ahí por muchos años. Ya es un jugador establecido entre los 5 primeros y 10 mejores. Tiene la fuerza y todos los medios para estar realmente aquí", dijo Novak.
-Hacer historia-
En la calurosa ciudad de Melbourne, Djokovic no tiene freno. El serbio ganó las siete finales que ha disputado en el Open de Australia. Luce prácticamente invencible, pero Thiem quiere romper las estadísticas y convertirse en el primer tenista nacido en los noventas que gana un Grand Slam.
Entre Djokovic y Thiem hay seis años de diferencia y también una cantidad de títulos impresionante. Mientras que el serbio ha conquistado 77 galardones, el austríaco solo cuenta con 16, la misma suma de Grand Slam que ‘Nole’ tiene a su poder. ‘Domi’, sin embargo, quiere dar el batacazo y por fin ganar su primer ‘Major’.
En Australia todo se mueve a merced de Djokovic. En la edición pasada, el serbio ya se convirtió en el máximo ganador histórico de dicho Grand Slam con siete títulos a su nombre. Ganar le sería propicio para alargar la ventaja con Roger Federer, que le pisa los talones con seis títulos.
Además, el serbio quiere continuar siendo el único tenista invicto en esta temporada y, de esa manera, conquistar su segundo título del año, luego de ganar el primero en Brisbane.
Thiem quiere tocar la gloria. Tiene mucho por lograr en la final de este domingo. Si logra frenar a Djokovic podría lograr el mejor ránking de su carrera, desplazando a Federer del tercer lugar. ‘Domi’ está en la condición de terminar con el dominio que ha impuesto el ‘Big 3’, que mantiene una racha de 12 Grand Slam seguidos desde que Stan Wawrinka ganó el US Open 2016.
El enorme crecimiento de Thiem sobre la cancha dura podría darle la razón. No por casualidad se deshizo de Nadal en cuartos. Ahora tendría que pasar por encima de otro del ‘Big 3’ para lograr su primer ‘Major’, como lo hizo Wawrinka en el 2014. El austríaco quiere ganar, además, el primer Open de Australia y el segundo Gran Slam para su país. En 1995, Thomas Muster le dio el primer orgullo a Austria tras ganar el Roland Garros.
Melbourne será testigo de otra auténtica batalla entre el ‘Big 3’ y la ‘Next Gen’. El que gane hará historia.