El ‘Cholismo’, la filosofía futbolística que es capaz de tumbar al poderoso Liverpool en Anfield

Para definir el 'Cholismo’ no hay que acudir a la RAE -de hecho, ni siquiera existe la palabra en el diccionario-, para entender esta filosofía futbolística hay que ver jugar al Atlético de Madrid. Así de sencillo como el "partido a partido” como mensaje con el que Diego Pablo Simeone alecciona a su tropa para afrontar cada ‘guerra’, porque así asume cada duelo, como una final del mundo. La fe mueve montañas, según el ‘Cholismo’. Y si no lo cree, habría que preguntarle al Liverpool, que el miércoles sufrió acaso una de las derrotas más dolorosas en su historia en el mismísimo Anfield: 2-3 que lo saca de carrera de la Champions League en octavos de final.

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Marcos Llorente es un ejemplo de cómo uno debe comportarse en la tropa del ‘Cholo’. Él siempre creyó pese a las pocas chances que tenía en el equipo, pero la noche de Anfield salió al campo como un guerrero más para marcar dos goles y lograr la hazaña de eliminar al Liverpool. “Nunca dejes de creer es algo que está inmerso en el club. Y nosotros creemos”, han sido siempre las palabras de Simeone.

SIMEONE, EL LÍDER

Tras un paso irregular en el fútbol argentino, con títulos con Estudiantes y River Plate pero con malas campañas tras el éxito, Simeone se entregó al reto europeo con Catania. En el 2011 tomó el cuadro italiano, lo alejó del descenso y así empezó a hablarse del ‘Cholismo’. Regresó a su país para conducir a Racing Club y lo clasificó a la Copa Sudamericana luego de que La Academia no accediera a torneos internacionales durante nueve años, hasta que en diciembre de ese año llegó la llamada que cambió su historia. Y la del Atlético de Madrid.

“No me asusta venir”, dijo el día de su presentación. El 'Aleti’ estaba décimo en la tabla con 19 puntos en 16 partidos, a 21 del líder Real Madrid, y fue eliminado de la Copa del Rey en los dieciseisavos de final por el Albacete, de la Tercera División española. Esa era la situación de cuadro ‘Colchonero’.

Pero Simeone no tuvo tiempo para siestas y echó a andar su estilo. “Nos gusta un equipo agresivo, un equipo fuerte, aguerrido, contragolpeador”, aseguró y así se manejó. Cinco meses después de su llegada, el ‘Cholo’ celebraba el título de la Europa League luego de golear 3-0 en la final al Athletic de Bilbao de su compatriota Marcelo Bielsa. Finalizó la temporada quinto. El Atlético había vuelto de la mano de quien fuera uno de los futbolistas clave en su doblete (Liga y Copa) en 1996.

GANAS DE GANAR

¿Pero por qué las victorias del Atlético son vistas como hazañas? ¿Por qué cada gol del cuadro de Manzanares parece que valiera el doble? Porque el Atlético defiende un único estilo, el de ganar sin que le importe lo que se diga. ¿A qué juega el Atlético de Madrid?, le preguntaron a Simeone tras vencer al Liverpool en el mismo Anfield. “A ganar. Con toda nuestra alma. A eso jugamos”, respondió. El ‘Cholismo’ en su máxima expresión.

Es que el ‘Cholismo’ no se trata de un estilo de juego, y si lo tuviera es el de batallar, el de ser una piedra en el chimpúm de rival, partir desde atrás y vencer por coraje. Porque ha logrado meterse en la élite del fútbol mundial sin la inyección económica que han tenido otros clubes como el PSG, Manchester City o Chelsea. Porque también están lejos de las inversiones millonarias del Real Madrid o del Barcelona. Así, en inferioridad de condiciones, compite. Y gana. Por ello gana adeptos. Son un equipo terrenal que se codea y tumba a los gigantes.

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Los atléticos se ubican en el segundo lugar del ránking de clubes de la UEFA, solo superado por el Real Madrid y por encima del Barcelona. De los millonarios, el City y el PSG son sextos y séptimos, respectivamente. Esta clasificación se toma en base a los resultados de las cinco últimas temporadas. Cuando Simeone llegó al club, apenas arañaba el puesto 23.

“El ‘Cholismo’, cuando no jugar bien no es una traición”, escribió Jorge Valdano en su columna de “El País”. Lo calificó de una filosofía en la cual “el resultado es Dios, porque al fin y al cabo, el resultado es irrebatible y el juego opinable”.

Los resultados dicen que con Simeone el Atlético ha ganado siete títulos en ocho años. Antes de él tenía 23 trofeos oficiales en sus vitrinas en 108 años de historia. Los datos aseguran que en las 15 apariciones en Champions, el Atlético ha jugado seis al mando de Simeone. En un total de 135 encuentros, Simeone estuvo en 70 en el banco.

Dos finales de Champions perdidas, sí, pero dos finales en tres temporadas que lograron alcanzar cuando su único antecedente fue la definición que disputaron ante el Bayern Múnich en 1974. La historia no le regalado la gloria de ganar la Orejona a los albirojos, pero se han convertido en protagonistas año a año.

LA ESTABILIDAD

Simeone cursa en este 2020 su noveno año al mando del Atlético de Madrid. Desde diciembre del 2011 que llegó, los del Atlético se han concentrado en entregarle al argentino todas las condiciones para que trabaje tranquilo. De hecho, el año pasado renovó su vínculo hasta el 2022 con una ganancia de 24 millones de euros al año.

Para cuando termine su contrato, tendrá más de una década en el mando, llegando ser uno de los técnicos con más tiempo en el cargo en los últimos años en el fútbol de élite mundial. Lejos están las 21 temporadas de Arsene Wenger en el Arsenal o las 27 de Alex Ferguson en el Manchester United, pero en un mundo donde los resultados mandan, Simeone ha sabido hacerse fuerte, y más aún si consideramos que en el mismo tiempo por el Barcelona han pasado Pep Guardiola, Tito Vilanova, ‘Tata’ Martino, Luis Enrique, Ernesto Valverde y Quique Setién, mientras que por el Real Madrid desfilaron José Mourinho, Carlo Ancelotti, Rafa Benítez, Zinedine Zidane, Julen Lopetegui y Santiago Solari.

No ha logrado tener el éxito de un Guardiola o Zidane, que ganaron Champions, pero nadie puede despreciar cada uno de los títulos que conquistó, entre ellos dos Europa League y dos Supercopa de Europa, una de ellas ganada ante el Real Madrid por un contundente 4-2.

EL NOMBRE CUENTA

Antes de la llegada del ‘Cholo’, la plantilla del Atlético apenas llegaba a valer 300 millones de euros. Ahora, bajo las nuevas condiciones del fútbol mundial, el cuadro Colchonero supera los mil millones. Bajo la dirección técnica de Simeone se ha generado ingresos que le han permitido fichar bien y multiplicar el valor de los jugadores que ya tiene.

En diciembre de ese 2011, el Atlético no tenía patrocinador en el pecho. Creció tanto el club que ahora tienen nuevo estadio, con nombre del patrocinador, y varios otros socios comerciales que apuestan por él. El ‘Cholismo’, aunque no tenga una Champions como caballito de batalla, es la filosofía del éxito, del sacrificio y de las hazañas.

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