Y el Oscar de los cómics es para... ¡Darth Vader y su princesita!
Darth Vader tuvo dos hijos. Eso ya lo sabemos. Y que uno se llamaba Luke y la otra, Leia, también. Pero lo que nadie nos dijo es que criarlos sería más complicado que aprender a usar La Fuerza o enfrentar al mismísimo Emperador.
Esas tribulaciones son las que en clave de comedia nos cuenta Jeffrey Brown a través de sendos libros ilustrados y cargados de humor que ya han ganado dos Oscar de los cómics: los premios Eisner. El más reciente, hace diez días.
Así es, en la última edición del Comic-Con, celebrada del 24 al 27 de julio, se anunció a los ganadores de este año del galardón instituido en honor a ese monstruo del cómic que se llamó Will Eisner, y en la lista figuraba “Darth Vader y su princesita” como la mejor publicación de Humor.
Esta delicia de libro -cuya edición en español devoré hace poco- contiene 64 páginas en las que el autor nos ilustra cuánto y cómo habría padecido Anakin Skywalker si le hubiera tocado en suerte criar y cuidar a una pequeña y tierna Leia que en su etapa adolescente se carga de rebeldía, ansiosa de escapar del lazo paternal, y lo hace sufrir como un Lord de los Siths nunca imaginó.
El cómic es una sucesión de ilustraciones a página completa cada una, en colores, que recrean pequeñas escenas o hacen guiños reconocibles al mundo de Star Wars.
Esto tiene su lógica en dos razones: 1) el autor, Jeffrey Brown, es un fanático de los Jedi y del mundo de Luke, Han y Leia; y 2) este trabajo cuenta con el aval de la franquicia Star Wars, es decir, del mismísimo imperio de George Lucas. (Además, debo añadir que el autor tiene dos hijos y sabe cómo viene el paquete).
En las páginas de este libro en pequeño formato (17×17 cm) vemos desfilar imágenes cargadas de un humor que, más que delirante, es tierno, con un montón de guiños a escenas, personajes y frases de la saga de La Guerra de las Galaxias. No hay que ser un fan de las películas para disfrutarlo aunque, por supuesto, se goza más si uno las ha visto (y revisto y revisto…).
“Darth Vader y su princesita” es una continuación, en realidad, de “Darth Vader e hijo”, el primero de los cómics en los que Brown trabajó sobre esa relación paternal y filial que trasciende y atraviesa todos los filmes de Star Wars. Solo que este primer texto resulta -a mi gusto- más entrañable, acaso porque gira sobre la relación de un papá con su niño de 4 años. Ah, y también ganó el premio Eisner en la misma categoría de Humor en el 2013.
En el caso de “… y su princesita”, las primeras páginas apuntan al lado infantil, pero luego el giro es más juvenil como decíamos y, bueno, invita y remite a otra clase de experiencias.
Brown, quien en el mundo del cómic norteamericano era más conocido por sus cómics de índole autobiográfica e intimista, está ahora marcado por La Fuerza porque acaba de editar otro libro -el 22 de julio se puso al alcance del público- en la lógica de los textos aquí señalados: “Good night, Darth Vader”.
En esencia, esta vez las viñetas van sobre cómo hace Anakin Skywalker (o sea, Lord Vader) para que sus dos retoños hagan zzzzzzz…
Pero esto no se queda allí, ya que también está caliente la edición del segundo libro ambientado en la vida que tendría un estudiante de la Academia Jedi -salió a la venta el 29 de julio- y todo hace pensar que se vienen más trabajos orientados en esa misma línea.
Como se puede ver, Brown se ha adentrado en esa galaxia de éxitos que es Star Wars y que de seguro dará mucho más que hablar a medida de que sigan saliendo noticias sobre la filmación de la nueva trilogía. Pero eso ameritará otro episodio en el futuro…
P.D.: Como este post se publica un 4 de agosto, desde aquí un beso a mi hijo Carlo André, fan y ultra fan del Hombre Araña, que cumple 5 añazos… Quizá por eso estos libros de Brown me han gustado tanto… Te amo mucho, Pochecho.