Una isla, una corte y una cámara escondida... 8/10
Diez programas televisivos para la historia:
30. La Pantera Rosa
Pantera Rosa es el nombre de un diamante en una película de culto del año 63. Por eso el dibujo animado que Friz Freleng creó para la secuencia de apertura de la cinta era elegante, sofisticado, sutil, perverso, ridículo, andrógino, silencioso, brillante y sobretodo rosado. El éxito de la película y la secuencia determinó que se realizara una serie de cortometrajes para cine, que luego, junto a material preparado especialmente para televisión, se transmitió en la nunca bien ponderada caja boba. Así, la Pantera Rosa, se convirtió en un fenómeno de masas que reúne en un solo cartoon, alucinación y surrealismo, trazo y humor finos e historias simples pero bien contadas en clave nonsense. 29. La Tremenda Corte
Esta serie empezó en la radio, en La Habana, Cuba, en enero de 1942. Mucho tiempo después se hicieron adaptaciones para teatro y para televisión. Las historias son simples: José Candelario Tres Patines roba o engaña a Luz María Nananina, su ex esposa, y esta lo lleva a la tremenda corte para esclarecer los acontecimientos y encarcelarlo. Tres Patines se libra tergiversándolo todo a punta de ingenio verbal y dobles sentidos a la latinoamericana. En tal trajín suele mencionar a su mamacita y su novia Cucusita que nunca se dejan ver. El señor juez es déspota pero encuentra en el cínico Tres Patines a un protegido con el cual siempre es bondadoso. Humor caribeño repetitivo y ¨criollo¨, al punto de que algunos han querido ver en este pedazo de historia un antecedente al Chavo del Ocho. Como aquel, una obra maestra. En los años 90, hubo un intento de revivir la “Tremenda Corte” en televisión. Fue un fracaso y solo se filmaron algunos capítulos.
28. Da Ali G Show
Malévolo, incisivo y muy revelador a su manera, Sacha Baron Cohen es un genio a la hora de poner en ridículo a personalidades como el ex secretario general de las naciones unidas Boutros Boutros-Ghali, el segundo astronauta en caminar sobre la luna Edwin “Buzz” Aldrin, el jugador y celebrity David Beckham y su esposa Victoria, el millonario Donald Trump, los ensayistas Gore Vidal y Noam Chomsky, el entrevistador James Lipton, el cantante de Pulp Jarvis Cocker, la porn star Jenna Jameson, y los jugadores de la NBA Kobe Bryant, Steve Nash y Shaquille O’Neal entre otros. Ante tal catálogo de conocidos, el programa parece una revista de sociales inspirada en un chiste cruel, salvo porque nunca las contradicciones de la sociedad contemporánea se mostraron con tanta crudeza en las voces de sus protagonistas ni dieron tanta risa como aquí.
27. La Isla de Gilligan
Un paseo en un barco que naufraga. Un clásico y un ícono de la cultura de masas. Un microcosmos que representa cierta parte de la sociedad blanca norteamericana de su tiempo que prefiere perderse en una isla antes que mezclarse con todas las sangres. Algunos estereotipos clásicos: los millonarios, el intelectual, la diva de Hollywood, la chica simple del campo, el capitán cascarrabias y un bufón que lo estropea todo y que a pesar de eso le da nombre a la isla y al show. Cabe preguntarse cómo es que se junta un grupo tan variado para un paseo de tres horas y cómo Ginger se las arreglaba para aparecer con un guardarropa fabuloso en medio de una isla desierta.
26. El Fugitivo
La vida se pasa volando y la del pediatra Richard Kimble, corriendo. Acusado injustamente de haber matado a su esposa, es sentenciado a muerte. Afortunadamente, el tren que lo transportaba a la cárcel se descarrila y el prisionero se convierte en el fugitivo al escapar. En la fuga, mientras es perseguido por el incansable teniente Philip Gerard, intenta encontrar al verdadero culpable del crimen, un misterioso y esquivo tipo con un solo brazo. Ha influido enormemente en la televisión. Ejemplos sobran: Los magníficos, El increíble Hulk, Kung Fu y recientemente Prison Break. David Lynch incluyó a un manco llamado Phillip Michael Gerard en Twin Peaks, otra obra maestra de atmósfera enrarecida.
25. Curb Your Enthusiasm
Larry David era la parte creativa más exasperante de Senfield. Un tiempo después de que terminara la serie, decidió montar un show inspirado en el personaje que el podría ser si las convenciones sociales no limitaran el accionar de su irritante personalidad. Esa es precisamente la gracia: Larry David te cae recontra mal. Algunas de las tantas innovaciones que ha traído a la comedia televisiva son: llevar al límite la idea de un show que trata sobre nada concreto, grabar con cámara en mano y un guión que más bien es una pauta para que los actores improvisen.
24. 24
Hacer una película en tiempo real es infrecuente, pero grabar una serie en la que cada minuto transmitido equivalga a un minuto de la vida de los personajes se consideraba una locura hasta que se creó a Jack Bauer, el agente que en medio de complejas tramas se la pasa salvando a su país de ataques terroristas, magnicidios y demás gracias de la era post 11 de setiembre. Como lo objetivo es el tiempo, asunto tan infrecuente en la ficción, los guionistas le permiten un desempeño físico tan intenso que algún lector de este blog sugirió que podría ser más fuerte que el protagonista de Duro de Matar. Si de alguna manera el tiempo es el tema, la ansiedad, su mayor mal, es la emoción dominante. Al final de cada episodio y en las cortinas que sirven de transición a los comerciales se escucha el blip de un reloj exasperante que deja sin aliento al protagonista y al espectador. Una hora te hace sudar. Una maratón te baja de peso, literalmente. Verla cansa, pero bien.
23. Candid Camera
Un programa fundacional que inició la cámara escondida pero que no empezó en la tele. De hecho, al principio la cámara fue un micrófono. Efectivamente, este show se transmitía a fines de los años 40 por la radio. Imitada, reverenciada y repotenciada por los siglos de los siglos, mucho antes de Punk`D desarrollo dos ideas igualmente revolucionarias: la de una broma con la complicidad de miles de espectadores y la de que la televisión perdona todo. O casi todo… en cierta ocasión sufrieron una demanda en la cual tuvieron que indemnizar a una de sus vícitmas por 300 mil dólares. Por lo visto la célebre frase ¨sonría, está en cámara escondida” no siempre resultaba convincente. Woody Allen escribió e interpretó bromas en los 60 y tanto Búster Keaton como Muhammad Alí aparecieron en algunos segmentos.
22. Los Tres Chiflados
Tres mil oficios buenos para nada se meten en las situaciones más inverosímiles que se pueden concebir con el fin de despertar la risa sobre la base del ridículo. Maestros del slapstick, Los Tres Chiflados nacieron en el cine pero algunos los tenemos presentes por sus transmisiones por televisión. Un capítulo cualquiera es equivalente a un ballet de hiperbólicas agresiones e ingenuidad en la que se desarrolla una comedia física de la sanción y de la ofensa con toques de ingenuidad y de picardía infantil oldschool. Antes de iniciada la transmisión de cada episodio debería colgarse un cartelito que diga “no intente esto en casa”.
21. Los Años Maravillosos
El programa más nostálgico de la historia tiene lugar en la Norteamérica de fines de los sesenta e inicios de los setenta. Eran tiempos de transición pero qué tiempos aquellos: Black Panters, hippies (cómo amamos a Karen), el hombre en la luna, “With a little help of my friends” en la aguardentosa voz de Joe Cocker, la vida en los suburbios y un beso bajo las ramas de un árbol. Porque los mejores años, los años maravillosos, fueron los de una historia de amor. Aquí la voz en off más sabia de la televisión recorrió los cinco años más problemáticos de un adolescente Kevin Arnold dejando claro un solo mensaje: todo tiempo pasado fue mejor.
…continuará
*Estimados lectores: Desde enero del 2009, el blog “Tv en serie” lo desarrolla Romina Massa. Este post escrito por el anterior blogger, Javier Masías, seguirá en línea pero sin opción de dejar comentarios.