Quién pega... ¿House o Dios?
Mi prima Sabrina dice que todo lo que se cuenta en esta serie tiene un correlato científico que lo sustenta. Sin embargo, “es bien alucinante”, añade escéptica. Siendo Sabrina doctora, para ella la mejor serie de médicos es Scrubs. Supongo que House me relaja a mí porque no soy doctor.
Pablo, uno de los lectores habituales de este blog, tiene una teoría contraria que me parece igualmente válida. Pablo dijo en su comentario que “en la UPC han creado la facultad de medicina, y en su videoteca están, a pedido de los profesores, las 2 temporadas de House en dvd, para q los alumnos las vean cuando haya algún trabajo de grupo”. Intuyo que Pablo piensa que a los doctores les encanta.
Por mi parte debo decir que no me gustan los doctores ni siento especial entusiasmo por las series que los retratan. Sin embargo, ésta si me interesa, quizá porque el tipo antes que médico es insoportable, porque siempre tiene la razón aunque esté equivocado, porque es un cínico de cuestionable moral y porque es humano aunque se crea divino. Me agrada porque es un buen personaje.
Me gusta todo lo referente a detectives imperfectos y brillantes y creo que acierto cuando digo que House pertenece a la misma estirpe que Monk y Fox Mulder: como ellos, House lleva al límite la perseverancia en la búsqueda de la perfección y la verdad, lo cual, paradójicamente, lo hace verdaderamente imperfecto.
Las similitudes con Sherlock Holmes -otro de mis héroes personales- son bastante obvias. Tienen en común una lógica implacable -entrañablemente antipática en House-, ambos tienen un bastón, un gran entusiasmo por la música y una galopante adicción a las drogas. Los dos tienen el mismo número de departamento -el 221B-, solo que en un caso queda en Nueva Jersey y en el otro en la Baker Street de Londres. Hay algunos otros guiños en la serie y uno involucra a Moriarty, el archienemigo de Holmes. David Shore, el creador de la serie, declaró en algún momento que efectivamente el personaje estaba inspirado en el célebre detective literario…
Sea como fuese, eso es historia antigua. La última noticia que tenemos del cascarrabias House es que acabó su tercera temporada . “Mi búsqueda es más pura”, dice en el decepcionante episodio final: el relato me pareció demasiado explícito por momentos y si bien es muy interesante verlo siendo “desafiado” por Dios (el rival máximo de quienes sienten que tienen atribuciones sobre la vida) me dio la impresión de que esta dimensión con alcances pseudoespirituales se desperdiciaba en medio de un episodio que, además, debía sentar las bases para lo que sucederá en la próxima temporada. Así, los directores y guionistas se demoran desarrollando, eso sí, con algún ingenio, las tramas de los doctores Foreman y Chase, cuya permanencia en la serie ha quedado en suspenso. Todo intento de hacer un capítulo memorable se desvanece rápidamente y al final del encuentro, House queda en la lona y Dios brilla por su ausencia. Así que para responder a la pregunta del título de esta nota, nadie pega y todos perdimos.
Podrán constatar que no estoy contento al ver como ha terminado esta temporada de una de mis series favoritas. Sé que algunos me van a apedrear por esto pero debo adelantarles que a pesar de tener por lo menos un episodio genial -el penúltimo capítulo de la primera temporada, “Three stories” con Carmen Electra-, y de que la serie en general es superior a la mayoría de cosas que se producen para televisión en estos días, House M.D. no está en mi lista de los mejores programas de la historia -que seguirá en la próxima entrega, sin falta-, aunque quizá sí en la de los mejores personajes.
Para los fanáticos tengo un link muy simpático… Si haces click aquí obtendrás una pequeña muestra de lo mejor de House, frases que no te conseguirán un aumento de sueldo pero sí la posibilidad de estar suficientemente lesionado como para convertirte en uno de sus casos.
*Estimados lectores: Desde enero del 2009, el blog “Tv en serie” lo desarrolla Romina Massa. Este post escrito por el anterior blogger, Javier Masías, seguirá en línea pero sin opción de dejar comentarios.