Sobre la campaña de Educación Inclusiva, apostemos por una escuela para todos
La semana pasada me invitaron al lanzamiento de una campaña de Educación Inclusiva. Me pareció interesante y me gustó mucho poder participar. Es importante tener más conocimiento, entender y aceptar las diferentes realidades (la diversidad) para lograr un mundo en donde todos tengamos las mismas posibilidades y seamos más felices. Pienso que esto solo nos enriquece y nos hace seres humanos más empáticos y tolerantes.
Vamos a ver que dice esta propuesta y entender que, probablemente este sea un proceso en el cual, principalmente, el colegio y sus educadores tengan que trabajar para tener las herramientas necesarias para que esto se cumpla de manera exitosa. No quisiera dejar de mencionar que los niños son, por naturaleza, los más inclusivos y habría que mantener esta esencia en cada hogar, ¡tenemos tanto que aprender de cada niño!
Beatriz Duda, presidenta de la Asociación Peruana de Déficit de Atención señala que “la educación inclusiva es la que atiende la diversidad de necesidades que presentan los estudiantes. Esto quiere decir que es necesario tener una mirada humanista de la educación, en la que prime el respeto al otro; así como flexibilidad y creatividad para implementar los cambios necesarios tanto en contenidos como en estrategias de aprendizaje”.
En esa línea, Pablo Gómez, presidente de la Sociedad Peruana de Síndrome de Down subraya que “este proceso debe ir transformando el sistema educativo y en general el sistema social. De esta forma alcanzaremos y recuperaremos valores fundamentales para el país, como la cooperación y la tolerancia, los cuales son claves para el desarrollo. La escuela debe convertirse en el eje transformador de la sociedad”.
Les dejo datos interesantes de la realidad en nuestro país, de la campaña y lo esta que busca lograr.
“La iniciativa está alineada a la Convención Internacional sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad y a la Ley N° 30797 que promueven la Educación Inclusiva en nuestro país. Esta última señala que los colegios privados y públicos tienen la obligación de recibir a todos los estudiantes, con las condiciones pertinentes para que el aprendizaje sea significativo y accesible a todos. Sin embargo, en la práctica, ingresar a la escuela y aprender sigue siendo un reto y una lucha para muchos. Pues, no contamos con una Política de Educación Inclusiva que brinde pautas para que las escuelas atiendan a la diversidad.
¿Qué busca esta campaña?
En un principio, que el sistema educativo se enfoque en las barreras que la escuela presenta y no se centre en las dificultades y condiciones de los estudiantes. Como parte de los escolares con mayor riesgo de ser excluidos del sistema, se encuentran aquellos con discapacidad (física, sensorial, intelectual o psicosocial), los que presentan una condición neurobiológica (trastorno de déficit de atención y/o hiperactividad o trastorno del espectro autista), con talento, superdotación, o que presentan diferencias idiomáticas, de género o en la procedencia social, cultural y económica. Es necesario comprender que la diversidad de estudiantes suma al aprendizaje y contribuye a una sociedad basada en valores inclusivos de colaboración y cooperación.
Además, se propone que el presupuesto destinado para la educación inclusiva, que actualmente es asignado a la Dirección de Educación Especial, se traslade a la Dirección de Educación Regular. De esta manera se podría contar con un mayor presupuesto para fortalecer la educación inclusiva a nivel nacional en las escuelas regulares, potenciando la formación de los docentes desde el inicio con un enfoque inclusivo, y equipando a las escuelas para que reciban con calidad a la diversidad de estudiantes.
Ante esta realidad, la Sociedad Peruana de Síndrome de Down, con apoyo de la Coalición por el Derecho a una Educación Inclusiva, está impulsando la campaña #EducaciónInclusiva, apostemos por una escuela para tod@s.
¿Qué es la Educación Inclusiva?
La educación inclusiva es un enfoque que valora y respeta la diversidad de los estudiantes y concibe las diferencias individuales no como problemas sino como oportunidades para enriquecer el aprendizaje. Para lograr que las escuelas sean inclusivas, se deben transformar las formas diferentes de educar, eligiendo estrategias y metodologías que variarán según las características de los estudiantes. Esto permitirá que cada uno tenga el derecho de acceder a la educación y participar de las actividades escolares, convivir con sus compañeros y progresar en sus aprendizajes
Pablo Gómez, presidente de la Sociedad Peruana de Síndrome de Down
Coco y Nico personajes de la Campaña
Sobre los personajes símbolos de la campaña: Coco y Nico
Esta iniciativa tiene como protagonistas a dos personajes: Coco y Nico, quienes son un gato y un oso, respectivamente. Representan a dos niños que son muy amigos, que son diferentes, y que se ven obligados a separarse por la exclusión que atraviesa uno de ellos en la escuela. Ambos simbolizan la diversidad del mundo, representando de una forma entretenida y amigable cómo todos somos diferentes. Su objetivo es mostrar cómo estas diferencias en lugar de separarnos nos pueden unir. Es necesario que como sociedad entendamos que vivimos en un mundo que debería acoger a todos por igual.
Ambos vienen compartiendo sus experiencias e historias de vida y lo que significa la educación inclusiva en las diferentes redes sociales: Facebook e Instagram. Los invitamos a que todos lo puedan seguir.
¿Qué ventajas o beneficios tiene la Educación Inclusiva?
- Enseña a convivir: Los estudiantes tienen la oportunidad de compartir con compañeros que presentan diferentes características y particularidades, lo cual permite que se puedan apoyar de manera colaborativa, comprender y empatizar con las necesidades del otro y sobre todo valorar y enriquecerse con las diferencias. De esta forma, se desarrollan valores como la empatía, solidaridad, tolerancia, respeto, etc.
- Promueve los logros de aprendizaje de todos: Permite que todos los estudiantes, sin excepción, alcancen logros en la escuela. Para ello, los docentes deben conocer y respetar sus ritmos de aprendizaje, sus distintas formas de captar información, considerar cuáles son las características particulares de su etapa de desarrollo e ir avanzando de manera progresiva hacia el logro de las competencias.
- Permite que el docente aprenda a enseñar con flexibilidad y creatividad: Los docentes aprenderán a diseñar sus clases basándose en las características y necesidades de todos sus estudiantes. Si bien esto implica un reto, los docentes desarrollarán su creatividad y experiencia para crear nuevas estrategias de enseñanza-aprendizaje, promover trabajos colaborativos entre estudiantes, organizar su clase de manera distinta, etc. De este modo, todos pueden aprender mejor.
- Fortalece el compromiso de la comunidad educativa: Una escuela inclusiva implica que los agentes educativos transformen sus concepciones y se abran hacia la diversidad. El portero que recibe a los estudiantes, el personal de limpieza, el personal administrativo, docentes, estudiantes, padres y equipo directivo, toda la comunidad debe comprometerse a promover una educación inclusiva de calidad. Recordemos que una sociedad inclusiva empieza desde una escuela inclusiva.
- Crea una sociedad inclusiva: Una sociedad que respeta y valora la diversidad, es una sociedad con mayor potencial para desarrollarse.
Algunas cifras:
- Discapacidad
- 10,4% de la población peruana tiene algún tipo de discapacidad, lo cual asciende a 3 millones 51 mil 612 personas (Censo Escolar, 2017)
- 54% de personas con discapacidad en edad escolar se encuentra fuera de la escuela (ENEDIS, 2012)
- 6 de cada 10 personas con discapacidad no llega al nivel secundario (ENEDIS, 2012)
- Procedencia
- 8% de la población entre 6 y 11 años procedente de la sierra peruana se encuentra fuera de la escuela (ENAHO, 2017)
- 27% de estudiantes entre 12 y 17 cuya lengua materna es el quechua y el aymara no asiste a la escuela, lo cual ocurre con el 23% de estudiantes de la amazonía del mismo grupo de edad (ENAHO, 2017)
- En las pruebas ECE de Secundaria, solo el 3,1% de estudiantes rurales logró el nivel satisfactorio en Matemáticas (Minedu, 2015)
- Analfabetismo
- Más de un millón de peruanos de 15 años o más no saben leer ni escribir, lo que equivale al 5,8% de la población de este grupo de edad (Censo Nacional, 2017)
- Trabajo infantil
- El 29,1% de niñas, niños y adolescentes que trabajan repite la escuela (ETI, 2015)
- Embarazo adolescente
- El 13,4% de adolescentes (15 a 19 años) son madres o están embarazadas (ENDES, 2017)”
Algo importante para rescatar es que la campaña solicita que se conformen equipos de apoyo desde las escuelas para que trabajen con las comunidades educativas y fortalezcan la atención a la diversidad, apoyando no solo a aquellos estudiantes con características específicas asociadas a la discapacidad, sino a cualquier estudiante en riesgo de exclusión o en posible situación de vulnerabilidad.
¡Veamos como avanza la campaña!
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