Incantation - La más retorcida banda del death metal y uno de los gigantes del sonido extremo en Lima de nuevo.
Este año las visitas de nivel al país han seguido siendo de mucho interés. La más destacada ha sido sin duda la de Saxon, y, si me atrevo a tomar al metal como una unidad de diversidades, creo que la otra gran visita que tendremos es la de Incantation, una de las más originales, innovadoras y talentosas bandas de la vertiente extrema.
Incantation pertenece a la generación del boom del death metal, su fama se consolida en la primera mitad de los 90, luego de los trabajos fundadores de Death, Master, Obituary y Morbid Angel. La banda, al lado de agrupaciones como Suffocation (otra gran visita de este año), Monstrosity, Malevolent Creation o Atheist, contribuyeron a consolidar una constelación particular en el cielo infernal del death metal. Su trabajo es, sin embargo, muy singular. Lejos de apostar por la veloz brutalidad a la que jugó la mayoría, se acercaron desde la oscuridad y el misterio. Siguiendo lo que sugiere su propio nombre, encantamiento, se orientaron hacia la faceta más tenebrosa y retorcida del metal, no a la manera estridente del black, sino soterrada y sórdida, más propia del doom, pero sin escapar a las coordenadas y posibilidades que el death metal les ofrecía.
Los temas de aquel lejano Onward to Golgotha de 1992 (con esa retorcida y malévola portada) sonaban enclaustrados, cerrados, oscuros y sobre todo enfermos. No destacaban por su violencia y velocidad, sino por su sinuosidad y persistencia. Por momentos es complicado distinguir temas, oyes sonidos esforzados y espesos, de una adictividad sorprendente. Quizás por eso las masas del metal prefirieron las simplezas brutales de Cannibal Corpse, o los tecnicismos extremos de Suffocation y no le prestaron toda la atención que merecieron. Incantation fue under entre los unders. Aun así, fueron construyendo su propio legado sin torcer la mano jamás. Nunca han tratado de sonar a otra cosa que no sea esa enferma percepción de John McEntee, guitarrista y compositor principal, que se fue perfeccionando a medida que los discos eran arrojados a la escena. Sí Onward fue memorable, Mortal Throne of Nazarene (1994) es quizás el más enfermo álbum que el death metal de aquella época haya dado, solo comparable a Upon the throne of the Apocalypse, del año siguiente que no es más que el mismo disco en una versión sin masterizar previa y con el orden de los temas invertidos.
Los discos continuaron apareciendo y como ha sucedido con casi todas las bandas death de aquel entonces se han seguido enfocando en esas líneas originales, atacándolas desde todas las direcciones posibles siempre a la búsqueda del perfeccionamiento de su sonido. Su más reciente trabajo es el Profane Nexus, una muestra de su excelente nivel actual favorecido por las modernas técnicas de producción sonora que proveen de una envergadura colosal al sonido deforme clásico de la banda. Hoy solo queda McEntee de la banda original, quien también lleva años asumiendo las labores vocales, al lado de un Kyle Severn en la batería que lleva ya, con sus intermitencias, un par de décadas a bordo. Allá por el 2007, ya estuvieron en Lima, tocaron en una discoteca pequeña, Onuba me parece que se llamaba, y dieron un show verdaderamente underground. Incantion nunca ha sido un sonido para las masas, ni siquiera para las masas extremas. Su aproximación es quizás demasiado desasosegante. Es por eso que en mi escala están por las nubes (las flamígeras del infierno) al lado de los más grandes nombres de todo el metal.
Incantation vuelve a Lima, esta vez se presentará en un escenario más grande, en el Festiva, este 4 de septiembre. Viene con Uada, banda de black metal melódico estadounidense de menos historia, pero que al parecer ha gozado de cierto predicamento dentro de la escena extrema orientada a ese estilo. No conozco la banda más que de algunos videos en You Tube, suenan muy profesionales y seguro que hay en Lima gente que les sigue con atención. Serán flanqueados por la banda venezolana afincada en Perú, Imitheos y los peruanos Psicorragia, quienes hacen un excelente death metal que todos deberíamos conocer. Se trata de un show extremo sin duda que espero que cuente con el marco de público que se necesita, sobre todo porque no deberíamos perder de vista a Incantation jamás, la banda que nos recuerda que el death metal no debería sonar sano.