Las bondades de tener una mascota
¿Sabías que cada vez que una persona acaricia o juega con su mascota libera endorfinas? ¿Y qué son las endorfinas? Pues nada menos que una sustancia química que emitimos los individuos cuando experimentamos una sensación de bienestar.
Vivimos en un mundo de caos y de prisas, en el que las innovaciones tecnológicas se imponen en nuestra sociedad. No hay duda que el mal del nuevo siglo es el temido estrés. Pues bien, en esta nota queremos decirte cómo el hecho de tener una mascota mejora tu salud y tu bienestar.Científicamente se ha demostrado que cuando acariciamos a nuestra mascota, la tensión arterial se reduce y nuestro organismo produce efectos relajantes. Y es que un animalito en casa es una fuente de amor y compañía.
También se sabe que las personas solitarias que tienen una mascota poseen una mejor calidad de vida y viven más tiempo que aquellas que no.
Es interesante observar a aquellos individuos que por una u otra razón enviudaron y para suplir de cierta forma la falta de compañía adquirieron una mascota. En ellos se produce un cambio de actitud, del estado depresivo en que se encontraban pasan a la tranquilidad emocional.
Y es que la persona siente que tiene a alguien por quien preocuparse, su mascota, y este animalito tiene a quien querer, su dueño. Una mascota da cariño sin esperar compensación alguna y el dueño se siente bien teniendo a alguien que depende de él. Ambos se benefician mutuamente.
Es curioso saber que hasta los peces tratan de acercarse a su dueño – haciendo un movimiento más rápido o pegándose al vidrio de la pecera- cuando este llega a casa. Es que saben que llegó quien los quiere o los alimenta.
Se ha tenido experiencias de niños autistas que reaccionan exclusivamente ante la presencia de una mascota, que puede ser un caballo, un pez o un perro, entre otros animales.
Algunas personas con problemas de locomoción han mejorado su condición gracias a la ayuda de animales como los caballos. Terapias de equinoterapia les han permitido fortalecer sus músculos mejorando notablemente.
Siempre acuérdate que una mascota es para darte placer, cariño, descanso y no problemas. Si tienes 70 años y el médico te ha recomendado realizar caminatas diarias, adquiere un perro pequeño o mediano que te acompañe en estos paseos. De ninguna manera un gran danés o un mastín porque podría hacerte caer o estresarte si se pelea con otros perros. Cuando salgas con tu perro a pasear tienes que estar contento más no preocupado.