Tres funciones, tres
Todo comenzará en Recuay, la plaza más alta de todas donde se juega el fútbol profesional en el país (3.400 metros sobre el nivel del mar). Las posibilidades de Alianza Lima en este partido aumentarán de acuerdo a la fortuna que Wilmer Aguirre y Claudio Velázquez tengan a la hora de embocar todas las opciones que Johnnier Montaño o Henry Quinteros dejan en sus pies. Cosa distinta es lo que pasará al siguiente partido, cuando Alianza reciba en Matute al Cristal. Ese partido será de mucha táctica, de inmensa sed de revancha por parte de los celestes que se quedaron con la sensación de que el anterior partido en el Callao fueron víctimas de un asalto por el gol que se le permitió anotar a Leandro Fleitas en posición adelantada. Será de máxima concentración en la defensa para no cometer un error que signifique el desnivel entre dos equipos que cuando se enfrentan entre sí, suelen ser muy parejos.
Y otra historia será en Chiclayo, cuando Alianza deba demostrar sin titubeos de que merece estar en la final y ratificar que es el equipo que mejor domina las presentanciones en suelo sintético fuera de Lima. Estos tres partidos determinarán el destino del equipo, que por ahora tiene su futuro en las manos y que tendrá que concentrarse en cuidar mente y cuerpo hasta que la oscuridad del túnel acabe y los ponga a puertas del ‘play off’.
Nos vamos a Recuay con el equipo y considero que Gustavo Costas tendría que apostar por un sistema inteligente para los primeros minutos del partido en los que el Sport Áncash saldrá a matar a los grones que -de hecho- se sacudirán en la altura. Creo que una línea de 5 hombres en defensa (Corzo, Contreras, Solís, Aparicio y Fleitas) y dos hombres fuertes de marca en el medio (Jayo y el paraguayo González) sería lo mejor para contrarrestar el vendaval de un equipo como el verde que ataca más con la desesperación de estar en riesgo de descender que con criterio futbolístico, pero que con la dirección de Mario Flores ha sabido aprovechar su condición de local de forma interesante, con lo poco que tiene.
Pero nada se compara a lo que están obligados el ‘Zorrito’ Aguirre y el ‘Karioka’ Velázquez. En condiciones normales este será un partido en el que los grones no tendrán muchas situaciones de gol. Se jugará casi a
mediodía (1:00 p.m.), hora en la que el sol a semejante altura quema y ahoga.
Entonces, si Aguirre sigue fallando de manera indiscriminada, Alianza corre un serio riesgo. Y no digo que todo lo que esté haciendo el ‘Zorro’ sea negativo; creo que un jugador como él se hace necesario en este tipo de partidos por su velocidad que sirve para el contragolpe. Contra CNI en Matute tuvo ocasiones que estrelló en el palo y no pudo celebrar. Ya le toca.
Velázquez está encontrando esa confianza que necesita todo delantero para ser útil y que solo te brinda el hecho de hacer goles constantemente. Esta racha racha del ‘Karioka’ se hizo esperar, incluso, llegué a dudar de su capacidad, pero su mejoría es saludable para Alianza en un tramo de la competencia en que el equipo necesita de todos sus futbolistas en la mejor condición. Este es el momento del argentino y este es el tiempo (3 partidos decisivos) en que los grones demostrarán que su llegada al ‘play off’ no será producto de la caída de otros equipos.
De hecho, me parece que en la liguilla A hay más competitividad que en la B y por eso las distancias son más cortas. ¿Superará el equipo de Costas satisfactoriamente este capítulo tan complicado? En mi opinión, sí. ¿Y en la de ustedes?