El 23 de noviembre, el Centro de Convenciones de ESAN en Lima se convirtió en el epicentro de la celebración más grande de detox y bienestar de Latinoamérica: el KO Fest. Este evento, único en su estilo, reunió a miles de participantes en un ambiente vibrante y lleno de energía positiva, dirigido por la carismática Ale Llosa, fundadora de KO.
Desde el inicio, el evento prometía ser una experiencia inolvidable. La jornada comenzó con sesiones de meditación que prepararon a los asistentes para el día lleno de actividad que les esperaba. Con la mente y el cuerpo alineados, el escenario estaba listo para las intensas y dinámicas sesiones de KO.
SiEntrenadores tanto peruanos como internacionales lideraron estas sesiones, utilizando una amplia gama de ritmos musicales, desde el enérgico reggaetón hasta la vibrante salsa, creando un ambiente festivo y motivador.
Un elemento innovador de estas sesiones fue el uso de botellas de la bebida rehidratante Powerade en lugar de las tradicionales pesas. Esta idea no solo facilitó que los asistentes se mantuvieran hidratados, sino que también añadió un toque creativo y funcional a los ejercicios, demostrando que el bienestar puede ser divertido y práctico.
El área de marcas fue otro punto alto del evento, con activaciones que capturaron la esencia del festival. Nike, uno de los patrocinadores principales, ofreció experiencias personalizadas que destacaron la importancia del deporte y el movimiento en la vida diaria. Rimac también estuvo presente, agregando un enfoque en la salud y el futuro del bienestar. El Comercio ofreció un stand con retos físicos y una portada de Somos gigante donde los asistentes podían tomarse una foto súper instagrameable.
No menos importante fue la feria de alimentación saludable, donde se ofrecían opciones gastronómicas que complementaban perfectamente la filosofía de vida saludable del festival. La cerveza sin alcohol de Corona fue especialmente popular, proporcionando una opción refrescante y alineada con el concepto de detox del evento.
Conforme la tarde daba paso a la noche, el ambiente se intensificaba aún más. El fin de fiesta fue un momento increíble, donde los asistentes no solo celebraron las actividades del día, sino que también compartieron sus experiencias y disfrutaron de la compañía de otros participantes, creando conexiones duraderas basadas en intereses comunes de salud y bienestar.
Ale Llosa, con su contagiosa energía y pasión por un estilo de vida saludable, fue una figura central durante todo el evento. Su enfoque en el bienestar integral resonó profundamente con los asistentes. “La fiesta que se vivió esta noche demuestra que no es solo el deporte, y mucho menos el resultado físico…es un sentir, es la ilusión por tener una buena y bonita vida lo que hace ‘la felicidad’, es la perspectiva con que miras tu vida incluidas las dificultades y por supuesto: la gente de la que te rodeas,” compartió Llosa, encapsulando la esencia de lo que el KO Fest busca transmitir.
El KO Fest de este año no solo fue un evento, fue una celebración de la vida, del bienestar y de la comunidad. Fue una demostración palpable de que la salud y la felicidad van de la mano y que, en un mundo cada vez más acelerado, tomarse un momento para cuidar de sí mismo es esencial. Este evento, sin duda, dejó una marca imborrable en todos los que tuvieron la fortuna de asistir, asegurando que el próximo KO Fest será esperado con aún mayor anticipación.