A finales de setiembre de 1962, Lima vivía una intensa actividad cultural que giraba en torno a la llegada de la primavera. Grupos de estudiantes se preparaban para los desfiles y equilibristas alemanes y waripoleras norteamericanas llegaban a la capital para presentarse en el corso primaveral de Miraflores.
El primer desfile fue realizado por la Universidad Católica en el marco de su tradicional semana PUCP y, como no, celebrando la llegada de la nueva estación.
Al caer la tarde del 25 de setiembre de 1962 se dio inicio a la caravana de vehículos, chalanes y antorchas en la plaza de La Recoleta (hoy Francia) siguiendo por Camaná, Nicolás de Piérola y Tacna, reingresando por Huancavelica al local central de la universidad. Mientras tanto los tranvías no podían hacer su recorrido normal y los vendedores de golosinas tomaban las pistas.
El público apostado a lo largo del trayecto aplaudió el paso de las guapas representantes de las facultades: Carmen Durand, reina del Periodismo, Fanny Maldonado, reina de Derecho, Gemma Romero, reina de Letras, Elena Gamboa, reina de Economía, Loty Valderrama, reina de Artes Plásticas, Pilar Díaz, reina de Educación, Coca Valderrama, reina de la Escuela Social, Martha Carling, reina de Ingeniería Civil, Hilda Gaviño, reina de Deportes, entre otras participantes.
Los carros alegóricos que más llamaron la atención fueron la calesa jalada por dos caballos de la facultad de Artes Decorativos y la calculadora gigante de la facultad de Economía.
Equilibristas y waripoleras
Para el 29 de setiembre aun se sentía mucho frío en Lima y sobretodo en Miraflores por su cercanía a la Costa Verde. Sin embargo, esta situación no impidió que familias enteras y jóvenes de todas las edades llenaran las tribunas que se levantaron a lo largo de la avenida Larco.
Este evento fue organizado por el Municipalidad y la Cámara de Comercio de Miraflores. Para animar el ambiente, un grupo de acróbatas alemanes, los Zugspitz Artisten, ejecutaron impresionantes pruebas de equilibrio en un cable de acero tendido sobre el parque Principal (hoy parque Central), desde la terraza de un edificio de ocho pisos hasta la avenida Larco.
Uno de los equilibristas, con los ojos vendados, caminó por el cable provocando exclamaciones de angustia entre los espectadores cuando en dos oportunidades tropezó con los alambres templadores, dando la impresión de que podía caerse.
También recibieron grandes aplausos una pareja de trapecistas que realizaron arriesgadas acrobacias en el mismo cable. Finalmente, tres de los equilibristas, colgando de una motocicleta que avanzó por el cable de acero hasta situarse sobre el parque, ejecutaron difíciles pruebas.
El suspenso fue amenizado por artistas que presentaron números de malabarismo y baile. A las 8:00 p.m. las waripoleras del Miami Jackson Band abrieron el corso que fue seguido por más de 20 carros alegóricos y amenizado por bandas militares y escolares.
Como era costumbre las reinas de belleza de clubes sociales de Miraflores, casas comerciales y la Universidad Católica fueron las más aplaudidas.